Revuelo en Alcalá la Real por el trato de dos ediles socialistas al de Vox
En política, como en el tenis, hay errores no forzados. Es lo que ocurrió anoche en el pleno municipal cuando dos concejales del PSOE, justo en el mismo pleno, quedaron en evidencia por la forma de tratar al único edil de Vox, Nicasio García. Todo ocurrió mientras se debatía una moción del PP —la cuarta en este sentido debate las últimas décadas en Alcalá la Real— para reactivar la reivindicación de que se transforme en autovía la carretera N-432, ya que ni los gobiernos socialistas ni los populares la han ejecutado. Una moción que, por cierto, salió adelante por unanimidad. Durante la segunda intervención de García, la también diputada provincial socialista Inés Arco, lo llamó “sinvergüenza”. Eso ocurrió después de que el concejal de Vox profiriera, entre risas de representantes del PP: “Pedro Sánchez va a dejar esto casi como un solar”, en referencia a sus escasas esperanzas de que se construya la autovía A-81. Aunque el propio destinatario del exabrupto de Arco ni siquiera se percató, el alcalde, el popular Marino Aguilera, la instó, de inmediato, a que retirara este insulto.
Acto seguido Inés Arco manifestó, con una alusión a un anterior rifirrafe con Aguilera: “Si tengo que retirarlo lo mismo que usted me ha pedido perdón o ha retirado lo que dijo en redes yo lo retiro”. Tras eso, con un desmentido del alcalde de que él hubiera insultado a nadie el punto siguió. Nicasio García retomó su parlamento: “De la izquierda me puedo esperar cualquier cosa, la verdad”. Pocos segundos después, entró en escena el portavoz socialista, Javier Frías, a quien le tocaba intervenir. “Bueno, señor García, hasta la presente la verdad es que está haciendo honor, un poco en consonancia con su nombre y no le hacíamos ‘ni casio’ a sus aportaciones”. Le afeó que no trajera cuestiones de interés a los plenos. Tras esta agudeza de Frías, el también parlamentario andaluz por el PP Juan Manuel Marchal aprovechó para meter baza por los “insultos a un compañero de la Corporación”.
Pidió a Arco y Frías que se apliquen unas declaraciones del líder de los socialistas andaluces, Juan Espadas, para rebajar el tono de la confrontación política. Tras eso, Marino Aguilera instó a respetar las formas y los nombres de pila y expresó su deseo de que estas conductas no se repitan. En la recta final de la sesión, Javier Frías, en el turno de ruegos y preguntas pidió perdón. “Mis mas sinceras disculpas, señor García. Es verdad que no ha sido conveniente hacer el juego de palabras. Me gustaría que sus aportaciones fuesen a veces más extensas o más propositivas y que fuesen más allá del sanchismo y su banda o de menospreciar ser de izquierdas como cuando dijo que ser de izquierdas es ir en contra de la salud mental”. El resto de la sesión no hubo casi choques e imperaron los buenos modales.