Marmolejo desentierra sus vestigios de la Guerra Civil
Han pasado casi cien años, pero, si se afina el oído, los ecos de la Guerra Civil aún pueden percibirse en Marmolejo. En diciembre de 1936, el bando nacional tomó el pueblo vecino de Lopera y el frente se ubicó en la frontera con Marmolejo, donde permaneció estable hasta el final del conflicto bélico. Fue un periodo de construcción continua de fortificaciones como trincheras, túneles, búnkeres y nidos de ametralladoras. De aquello, prácticamente un siglo más tarde, tan sólo queda el relato escrito y algunos restos, muchos de ellos escondidos entre los olivares marmolejeños del entorno de la Antigua Nacional. Todos estos vestigios están inventariados en el Catálogo de Patrimonio Histórico impulsado por el Ayuntamiento de Marmolejo, y ahora, por medio de un proyecto arqueológico que está en marcha, se pretende sacarlos a la luz para asegurar su conservación y dar a conocer al municipio, la provincia y el resto del mundo esa parte del pasado marmolejeño que aún se resiste al completo olvido.
La iniciativa tiene su origen en el mencionado Catálogo de Patrimonio Histórico elaborado desde la concejalía homónima. Según el edil, Rafael Valdivia, fue el arqueólogo marmolejeño José Luis Serrano, colaborador de esta área municipal, quien planteó la idea de iniciar una investigación para “desenterrar” los vestigios de la Guerra Civil reflejados en el inventario. “Sabíamos que había restos de fortificaciones y trincheras porque se veían superficialmente en terrenos agrícolas. Se estaban viendo afectados por las labores del campo, así que creímos conveniente poner en marcha la iniciativa”, aclara el concejal. El siguiente paso fue elaborar el proyecto de intervención arqueológica, que recibió el visto bueno de la Delegación Territorial de Cultura y Patrimonio Histórico.
Los trabajos, dirigidos por dos arqueólogos, el aludido José Luis Serrano y Marcos Soto, comenzaron hace unas dos semanas y ya han arrojado los primeros resultados. Poco se puede contar aún al respecto, según el concejal de Patrimonio Histórico, sólo algunos detalles. Por ejemplo, se ha logrado excavar un refugio y dos nidos de ametralladoras de los que se pensaba que habían sido simples trincheras. “Aquí hubo lío”, apunta Valdivia, quien explica que se han encontrado restos de proyectiles y tiendas de campaña y que ambos nidos sirvieron para contener el avance del bando nacional cuando este tomó el pueblo vecino de Lopera a finales del 36. “Datan de febrero del 37 y se nota el buen hacer, obra de ingenieros militares del ejército republicano para proteger las vías del tren”, añade. Son algunas de las conclusiones iniciales de un proyecto cuya primera fase, esta que está en marcha, la financia de manera íntegra el Ayuntamiento, aunque aún no se sabe el alcance económico exacto de la intervención.
La segunda fase será convertir el yacimiento en reclamo turístico. Según Valdivia, los restos de fortificaciones de la Guerra Civil en Marmolejo “son inauditos en Andalucía por su excepcional estado de conservación”. El edil resalta, que, además, el turismo bélico “está en boga”, por lo que “hemos de aprovechar esta oportunidad para contar con un nuevo recurso que atraiga visitantes”. El Ayuntamiento buscará diversas vías de financiación para alcanzar esta última meta.