Los taxis aéreos eligen Villacarrillo para sus vuelos experimentales
La startup alemana de taxis aéreos Lilium elige el Centro Experimental de Vuelos no Tripulados Atlas, de Villacarrillo, para hacer pruebas de vuelo de su innovador desarrollador de aviones PHX2, un modelo de aeronave eléctrica de despegue y aterrizajes verticales (eVTOL por su siglas en inglés: all-electric Vertical Take-Off and Landing). Es el enésimo proyecto de fuste que acoge Atlas, que se consolida como foco de desarrollo tecnológico y económico de la provincia jiennense. Antes de la llegada de Lilium, la empresa española Zero 2 Infinity, comenzó a trabajar en su proyecto para ofertar vuelos de turismo espacial en globos estratosféricos desde el centro villacarrillense, una iniciativa que ya se encuentra en su fase final. Además, Atlas acogió el pasado diciembre el vuelo de demostración final del proyecto europeo Trace, que busca la precisión del posicionamiento de aeronaves no tripuladas.
Según se explica desde Lilium en un comunicado, la firma, en su deseo de hacer pruebas de su PHX2 más allá de las posibilidades que le ofrecía Alemania y en espacios que permitieran a sus aeronaves coger velocidades más altas en distancias más largas, analizó “múltiples ubicaciones potenciales” en España, incluyendo aspectos como la topología terrestre, el clima y las instalaciones disponibles. Finalmente, se decantó por el centro Atlas porque “proporciona una infraestructura óptima y permite que la aeronave vuele sobre un área grande y despoblada mientras hace una transición completa a un vuelo de alta velocidad”. Lilium resalta que “las modernas instalaciones y el apoyo del Centro de Tecnologías Aeroespaciales Avanzadas (Catec)” resultaron clave para que la empresa alemana se decantara por las instalaciones de Villacarrillo.
La aeronave PHX2 tiene capacidad para cinco pasajeros, puede volar a lo largo de 250 kilómetros y alcanza una velocidad de crucero de 280 kilómetros por hora a una altitud de hasta 3.000 metros. El vehículo utiliza 36 ventiladores con conductos integrados en las alas para proporcionar control del vector de empuje. Según se explica en la página web de Lilium, este modelo “ofrece bajo nivel de ruido y alto rendimiento con cero emisiones operativas”, por lo que se consigue “acelerar la descarbonización de los viajes aéreos”. El piloto jefe designado para las pruebas en Villacarrillo es Andrew Strachan, que atesora una experiencia de más de 30 años en estas lides. Antes de unirse a Lilium, sirvió en la Royal Air Force (RAF) y fue piloto de pruebas en Leonardo Helicopters.
Lilium se fundó en 2015. Sus instalaciones centrales están en Múnich, pero también cuenta con equipos en Europa y Estados Unidos. Su equipo de trabajo lo componen más de 750 personas, de las que 400 son ingenieros aeroespaciales. La empresa se dedica al diseño de un método “sostenible y accesible” de “transporte regional de alta velocidad para personas y mercancías”.