Las reservas de la cuenca del Guadalquivir están en el nivel más bajo de los últimos 25 años

Los embalses de Jaén mejoran levemente hasta el 24,7% de su capacidad tras las últimas lluvias
El embalse del Encinarejo, que actualmente está al 91,88% de su capacidad. / Archivo Diario JAÉN.
Laura Díaz Barrio

El dato es demoledor: las reservas de agua de la cuenca del Guadalquivir están en el nivel más bajo de los últimos 25 años. Las lluvias de febrero no son suficientes para reparar el daño en los embalses jiennenses y así se puso de manifiesto en la primera Comisión de Desembalse de este año de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG). Pese a las últimas precipitaciones, que han hecho que desde el pasado octubre se recojan 311 l/m² y la cuenca se acerque a la media histórica de 316 l/m², “la situación es desfavorable y similar a la del 2023, o incluso peor”, se ha señalado desde la CHG.

Las aportaciones a los embalses de la demarcación del Guadalquivir en lo que llevamos de año hidrológico -1 de octubre a 30 de septiembre- han sido de 760 hm³, cuando la media de los últimos años se sitúa en 1.611 hm³, informan desde la Confederación. La cuenca se sitúa así al 24,9% de su capacidad -actualmente con 2.000 hm³ almacenado, lo que supone 60 hm³ menos que hace un año- y el Sistema de Regulación General presenta un 21,9 % de llenado -1.236 hm³, 17 hm³ menos que en febrero de 2023 y con un déficit de 30 puntos porcentuales respecto a la media histórica-. Así las cosas, en la comisión se puso el foco en esta reducción que ha provocado que “las reservas están en los niveles más bajos de los últimos 25 años, con una reducción del 63% en las aportaciones de agua en los embalses respecto a la media histórica”.

¿Cómo están los embalses de Jaén?

Los embalses de la provincia se encuentran de media al 24,7% de su capacidad con 583,363 hectómetros cúbicos (hm3) de agua embalsada para una capacidad total de 2.361,354. El pasado 2 de febrero, el agua embalsada en Jaén se encontraba al 21,49% y tan sólo hace cinco días, al 24,25%. Los valores han mejorado levemente en el conjunto de los pantanos de la provincia, tal y como se puede extraer de los últimos datos del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) del Guadalquivir.

El embalse que más agua conserva es el del Encinarejo, que con 13,966 hm3 para una capacidad de 15,2 se encuentra al 91,88%. Le sigue, en segunda posición, el Dañador, al 88,5% gracias a sus 3,600 hm3 de volumen embalsado para una capacidad de 4,136. Cierra el podio el pantano del Aguascebas, que con 4,503 hm3 de agua y una capacidad de 6,374, se encuentra al 70,64%. Continúa la lista con el de Siles está al 47,69% con 14,387 hm3 de agua cuando le caben 30,169. La Fernandina, con 77,808 y una capacidad de 247,138, está al 31,48%; el Víboras, en sexta posición, tiene 5,017 hm3 de agua embalsada, lo que lo deja al 29,65% de su capacidad, pues le caben 16,922; el Tranco de Beas, que se encuentra el 28,90%, mantiene 146,163 hm3 de agua de los 505,731 que puede albergar; el Jándula, al 25,27%, conserva 82,159 con una capacidad superior a los 325,071 hm3 de agua; el Rumblar, con 34,771 y una capacidad de 140,080, se encuentra al 24,82%; el Guadalén, al 21,33%; el Quiebrajano, al 18,51%; el Giribaile, al 18,33% y el Guadalmena, al 17,96%, completan la lista en la provincia.

Con esta situación hidrológica parecida a la de 2023, informan desde la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, que la próxima campaña de regadío “se dibuja también análoga a la anterior aunque las dotaciones se concretarán en la próxima Comisión de Desembalse prevista para principios del mes de abril2. La cuantía final de estas dotaciones dependerá así de las lluvias últimas de invierno y de la primavera; y según las predicciones meteorológicas se esperan precipitaciones para los próximos días de febrero, con especial incidencia en la zona de Jaén, y un marzo lluvioso.