La voz de la Campiña llega hasta el Congreso de los Diputados

El portavoz de los afectados por las megaplantas solares interviene como ponente en la Cámara Baja
Rafael Alcalá junto al resto de ponentes de la jornada “Claves para frenar la agonía del campo” celebrada en el Congreso.
Diario de Jaén

Las quejas de Arjona, Lopera y Marmolejo llegan hasta el Congreso de los Diputados. El pasado 28 de febrero, Día de Andalucía, el portavoz de la plataforma Campiña Norte contra las Megaplantas Solares, Rafael Alcalá, participó como ponente en la jornada “Claves para frenar la agonía del campo”, celebrado en la cámara. El encuentro abordó los problemas que atraviesa el mundo rural, con especial atención a la competencia desleal de terceros países, la sostenibilidad agrícola y el impacto de las plantas fotovoltaicas sobre el suelo productivo.

Concretamente, Alcalá intervino en la mesa redonda titulada “Energía o alimentos: el dilema del suelo”, donde expuso el caso de la Campiña, una de las zonas más afectadas por la proliferación de plantas solares sobre terrenos agrícolas. El portavoz denunció que la instalación masiva de placas solares está provocando el arranque de miles de olivos, con lo que afirmó que “se pone en riesgo la economía rural y el ecosistema”. “Si hablamos de descarbonización, es de quitar el dióxido de carbono que ya hay en la atmósfera y eso se hace con plantas y árboles. Parece que no saben que los olivos son árboles. Nada más y nada menos que 500 000 olivos se arrancarían con todos los proyectos de fotovoltaicas”, afirmó.

También criticó la falta de información sobre estos proyectos por parte de las administraciones locales. Alcalá denunció que muchos ayuntamientos están aprobando estas instalaciones sin informar adecuadamente a los vecinos afectados. “Nos han convertido en números, como ganado que va al matadero. Según la Junta de Andalucía, solo el 0,44 % de los propietarios se verán afectados, pero aunque seamos pocos, tenemos derecho a defender lo que nos pertenece”, señaló. Alcalá lamentó de igual forma la ausencia de algunos partidos en la jornada, como Sumar, que declinó la invitación a última hora. A pesar de ello, el acto contó con la participación de eurodiputados, parlamentarios nacionales y representantes de distintos grupos políticos, aunque las posturas defendidas fueron rebatidas por algunos de los asistentes.

“La política debe estar al servicio del ciudadano, no de las grandes empresas. Basta ya de hipocresía y de un falso ecologismo que solo favorece a empresas amigas”, concluyó Alcalá, quien pidió mayor transparencia y diálogo con los afectados antes de seguir adelante con estos proyectos.