Falsa alarma: la Policía Nacional reabre al tráfico la Corredera de San Fernando, en Úbeda

Todo ha quedado en un susto. La Policía Nacional ha reabierto la Corredera de San Fernando al público después de mantenerla acordonada debido a la aparición de un “paquete sospechoso” en el Monumento a la Semana Santa de Úbeda.

Según ha podido saber Diario JAÉN, a primera hora de esta lunes 16 de junio, se encontró este extraño objeto por lo que se pusieron en marcha los debidos protocolos para dilucidar el contenido del mismo. Para ello, llegaron hasta la ciudad patrimonial agentes del Tedax, especializados en la desactivación de artefactos explosivos. Fuentes consultadas por este diario han explicado que se ha hecho uso de un robot dedicado a tales situaciones, el cual ha sido movilizado desde la ciudad de Granada. Para garantizar la seguridad de todos los vecinos, se ha mantenido la zona acordonada y han desalojado edificios y negocios cercanos.

Alrededor de las 12 de la mañana, el dispositivo ha finalizado al comprobar que el paquete no conformaba una amenaza para la ciudadanía, por lo que se ha reabierto el paso al tráfico y los establecimientos están volviendo a la normalidad. Por suerte, todo ha quedado en un susto en una mañana muy atípica en Úbeda.

El Ayuntamiento de Úbeda ha valorado que la aparición este lunes de un objeto “sospechoso” que obligó a acordonar la calle Corredera de San Fernando y a avisar a los Tedax haya quedado “en un susto”, al tiempo que ha destacado la coordinación entre los cuerpos de seguridad y emergencia para “garantizar una respuesta rápida”.

Así lo ha indicado en una nota el concejal de Seguridad Ciudadana y Movilidad, Jerónimo García, quien ha informado sobre el operativo de seguridad activado después de que se detectara el citado artefacto en la parte trasera del monumento a la Semana Santa.

Según ha explicado, la alerta fue trasladada por la Policía Nacional tras identificar un elemento que “presentaba claros indicios de haber sido manipulado”. “Se trataba, al parecer, de una batería en mal estado, con cables colgando y una apariencia anómala que, por su ubicación y aspecto, generaba una sospecha razonable”, ha afirmado.

Esta circunstancia motivó la activación inmediata del protocolo de seguridad. Ante dicha alerta, la Policía Nacional procedió a acordonar la zona, cortar el tráfico rodado y peatonal en toda la Corredera y desalojar algunos establecimientos próximos, todo ello como medida preventiva para salvaguardar la seguridad ciudadana.

“Desde el primer momento colaboramos en redirigir el tráfico desde la parte baja de la Corredera y los bajos de la Trinidad, activamos los protocolos de prevención con los bomberos y pusimos todos los medios a disposición para garantizar una respuesta rápida”, ha añadido.

Ha subrayado, además, que “en situaciones como ésta, siempre es preferible extremar la precaución”. Afortunadamente, todo ha quedado en un susto, pero lo importante es que se actuó con eficacia y celeridad y no ha habido que lamentar ningún incidente”, ha concluido García.