Dulce emoción con la Virgen Niña en Los Llanos

Varias mujeres interpretaron canciones exclusivas a la imagen tras la procesión
Discurrir de la Virgen Niña por el enclave puerteño. / David Cejudo / Diario JAÉN.
Diario de Jaén

VÍDEO

El calor propio de la época veraniega siempre es un aliciente de que se acercan los días grandes de la aldea de los Llanos de Arriba. Este recogido lugar ubicado a tres kilómetros de la Puerta de Segura, municipio al que pertenece, multiplica su población gracias a la celebración de sus tradicionales fiestas de verano, unos días en los que la aldea disfruta de la procesión en honor a la Virgen Niña. Esta imagen tiene una curiosa historia. Y es que, para poder adquirir su propiedad, tanto los vecinos de los Llanos de Arriba como la de Los llanos de Abajo hicieron todo lo posible para conseguirlo. Cada uno puso lo que su economía le permitió. Luego, las mujeres se desplazaron hasta La Puerta de Segura y la llevaron sobre sus hombros hasta la Plaza de Los Llanos.

El día grande de las fiestas se celebró una misa en honor a la Virgen Niña con su posterior salida procesional. Durante el recorrido, los sones de la Banda de Música de Los Pizarrines de la Puerta de Segura pusieron la melodía indicada para crear un ambiente festivo en honor a la patrona. Un breve trayecto que se realiza en alrededor de tres cuartos de hora. Nada más regresar a su lugar inicial, todas las mujeres, vecinas de la aldea de Los Llanos de Arriba, dedicaron una serie de canciones exclusivamente para la Virgen Niña. La más especial de todas, según ellas, fue la de “Dibujar a la Virgen”, a través de la cual dan gracias por todo lo que ella les dio. Al finalizar la procesión, la fiesta continuó con la actuación de El Rubio, un artista que es todo un ídolo para las personas más longevas de la aldea puertense.

“Lo paso muy bien, en convivencia con los vecinos de la aldea, los que son de aquí normalmente, y los que vienen a acompañarnos”, manifiesta Virtudes Puertas, alcaldesa de La Puerta de Segura. Clara Mercedes Rodríguez busca que no se pierda la fiesta con el paso del tiempo y trae a sus nietos por tradición. “Cuando la Virgen Niña pasa por la zona baja me recuerda a mi marido, que falleció hace poco y es muy especial”, destaca emocionada Andrea Sánchez. Para José Izquierdo, quien tocaba antes en la banda municipal, es una fiesta muy emocionante y que nunca se pierde. “Me encanta este día, porque estoy cerca de la Virgen Niña. También me pone muy contenta las jornadas de convivencia que pasamos todos”, subraya Maricruz Tavernas.