Dos tarantas para Víctor Manuel

Joselete de Linares, con la guitarra de Fernando Contreras, se las dedicó durante el nombramiento del asturiano como Hijo Adoptivo de El Centenillo
Joselete de Linares y Fernando Contreras, al fondo a la derecha, de negro, Víctor Manuel. / Diario JAÉN.
Diario de Jaén

Dos estilos de cantar pero un mismo destinatario: el minero que arranca el mineral de las entrañas de la tierra, aún a riesgo de perder la vida, mal pagado, para sobrevivir con la familia. Víctor Manuel lo cantaba a su abuelo Víctor, minero, en la emblemática canción que tiene el mismo nombre. La compuso y lanzó en 1969. ¿Qué recordaría este sábado en la Plaza del Minero de El Centenillo, sentado en una mesa, vestido de negro y frente a un escenario? Sobre sus tablas, José Heredia Heredia, Joselete de Linares, y a la guitarra, Fernado Contreras, El Cáliz. El momento fue al cierre del acto del nombramiento de Víctor Manuel como Hijo Adoptivo de El Centenillo, además de por su trayectoria por su estrecha vinculación al mundo minero.

En 1969, el cantante y compositor asturiano cantaba aquellas estrofas: Sentado en el quicio de la puerta/ El pitillo apagado entre los labios/ Con la boina calada y en la mano / Una vara nerviosa de avellano.../ El abuelo fue picador/ Allá en la mina/ Y arrancando negro carbón/ Quemó su vida...

En el vídeo grabado por Diario JAÉN en el acto, que retansmitió en directo a través de esta web, Joselete de Linares le dedica dos tarantas, una de Cabrerillo y otra de Luquita de Marchena. Vínculo de la mina y de los mineros de El Centenillo y Linares con la mina y los mineros asturianos. Sones y letras de carbón y plomo.