Bajo rendimiento cerca del ecuador de la campaña
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Hace más de un mes que comenzó la campaña para los agricultores jiennenses que apuestan por el aceite de oliva temprano. Los madrugones volvieron a plagar el campo, mientras las cuadrillas, los todoterrenos y los tractores iniciaban otra vez su transitar, hectárea a hectárea, olivo a olivo, para recoger la aceituna de cada árbol.
Es el caso de la pedanía villacarrillense de Mogón, donde se recoge la aceituna que irá a parar a la Cooperativa San Vicente Puerta de las Villas. A pesar del parón producido por las lluvias caídas durante el mes de octubre, la recogida ha avanzado a buen ritmo. El ruido de las varas mecánicas, junto al palpitar de las tradicionales es ya un inconfundible síntoma de trabajo duro. Las lonas, extendidas de nuevo sobre la tierra, reciben el envase natural del producto estrella de la provincia. De ahí, al remolque que, tirado por un tractor, llegará hasta la almazara de destino.
Un proceso arduo que da forma al día a día de los agricultores, que se encuentran, un año más, con una producción más baja de lo previsto. Así lo afirma el presidente de la cooperativa San Vicente Puerta de las Villas, José Gilabert, explicando que “el campo, en relación a la cantidad de cosecha, está mejor que el año pasado, pero no está homogéneo”. “Es decir, hay zonas mejores y zonas peores, sobre todo los secanos y riegos deficitarios, que han acusado mucho el estrés hídrico”, explica, incidiendo en que “los secanos se han quedado muchos casi a cero y los riegos, que tenemos aquí muchos dentro de pozos que son deficitarios, pues al final acusaron mucho la falta de lluvias en esta zona”. En general, explica Gilabert, se espera “una cosecha media-baja”, en la que “se está viendo que los rendimientos son muy bajos”.
Al respecto, explica que los rendimientos de la zona rondan tan solo un 16 por ciento “en bruto”, aunque señala que “luego hay un índice corrector”. Por ello, recordando el aforo previsto por la Junta de Andalucía —que estima una producción de aceite en la provincia de Jaén de 445.000 toneladas, un 116 por ciento más que en la anterior— el presidente de la cooperativa villacarrillense opina que “no se va a cumplir”. “Por mi propia experiencia, y tras un mes de campaña, yo arranqué con un rendimiento del 16% y esta tarde me he llevado una mala sorpresa porque he visto las parcelas recogidas hace menos de una semana con un 13% de rendimiento”, advierte, lo que le hace pensar que el aforo no se cumplirá.
Eso, incide, a pesar de las últimas precipitaciones, que marcaron el mes de agosto, y que a su parecer “llegaron tarde, sobre todo en Jaén y más en esta zona”. “En otros sitios cayeron 70 litros, y aquí en cambio cantidades muy pequeñas”, explica, que a pesar de ello culpa mayormente al “parón” meteorológico experimentado en el mes de septiembre. “Es el mes fundamental para la lipogénesis, el proceso mediante el cuál se forma el aceite en la aceituna”, y durante la cual, incluso, como recuerda Gilabert, “llegó a arrugarse”. “Eso ha afectado mucho al tamaño de la aceituna y por su puesto al rendimiento del aceite”, incide.
Aun queda, sin embargo, mucho por recoger en toda la provincia, ya que mientras que Gilabert está a punto de terminar la campaña, en muchos otros territorios no han comenzado aún la recolección. Es debido a la decisión de la recolección temprana, para “producir aceites con mayores calidades”, sobre todo en campañas de bajo rendimiento como las experimentadas en los últimos años. Al menos hasta el mes de febrero, los agricultores jiennenses proseguirán con el tradicional vaivén, surcando el mar de olivos para vivir a través de su producto estrella.