BioForeste, herramienta para afrontar el reto demográfico mediante el aprovechamiento de recursos naturales

La Universidad de Jaén pone en valor la transferencia de conocimiento de la Universidad a la sociedad y el carácter transformador de este proyecto, financiado con casi 2 millones de euros de los Fondos Next Generation
Presentación de los resultados del proyecto BioForeste. / Universidad de Jaén.
Diario de Jaén

Demostrar que los ecosistemas y montes son mucho más que un paisaje y que atesoran una fuente de riqueza capaz de fijar población al territorio. Esa es la principal premisa que tenía el proyecto BioForeste “Bioeconomía en los espacios forestales municipales del eje este de la provincia de Jaén”, financiado con casi 2 millones de euros los Fondos Next Generation para la Transición Ecológica, cuyos resultados se han presentado este martes en una jornada. El rector de la Universidad de Jaén, Nicolás Ruiz, ha puesto en valor en la apertura de esta jornada la transferencia de conocimiento realizada desde la Universidad a la sociedad a través de este proyecto y su incidencia en el desarrollo territorial, en concreto en los tres municipios donde se ejecutado: Bedmar, Villarrodrigo y Huesa. “BioForeste nace como un proyecto transformador para unir dos cuestiones que no deben separarse: el aprovechamiento de los recursos naturales y la creación de empleo ecológico. Esta estrategia de diversificación pone el foco donde más se necesita, en esos territorios que afrontan el ‘reto demográfico’ y donde es urgente generar nuevas oportunidades”, ha declarado el Rector.

Sobre el trabajo de investigación realizado, Nicolás Ruiz ha destacado la excelente labor del equipo del Observatorio de Cambio Climático Global de las Sierras Subbéticas, liderado por el catedrático Julio Alcántara, y con la aportación de un amplio equipo de investigadores en Ecología de la UJA. En concreto, ha explicado que la principal contribución de la UJA en este proyecto está siendo el estudio exhaustivo de la salud del suelo. “Queremos saber, con certeza científica, si el paso de la maquinaria o la entrada del ganado regenerativo ayuda a fijar carbono o si, por el contrario, estresa el ecosistema”, ha explicado Nicolás Ruiz. Por su parte, el presidente de la Diputación de Jaén, Francisco Reyes, ha apuntado que BioForeste “ha permitido demostrar lo que la bioeconomía puede suponer para una provincia como la de Jaén, donde tenemos cuatro parques naturales, una extensión forestal importante, además de casi 70 millones de olivos”. En este sentido, ha asegurado que la experiencia del proyecto en los municipios donde se ha desarrollado “demuestra la oportunidad que el ámbito forestal supone para un territorio como el nuestro”. “Y tenemos que aprender de la experiencia de este programa, lo que ha supuesto la experiencia de sensibilización que hemos realizado en todos los municipios, pero también lo que ha sucedido este verano en España, porque los incendios hay que apagarlos en invierno y con la sensibilización a la ciudadanía. Creo que este ha sido el valor añadido de este programa que nosotros valoramos muy positivamente”, ha afirmado Francisco Reyes.

En referencia a los resultados preliminares del proyecto, el Rector ha indicado que “el clima no espera”, apuntando que los datos obtenidos sugieren que las sierras del sur (Mágina y Cazorla) pueden sufrir un deterioro significativo en las condiciones para determinadas plantas, como el tomillo aceitunero o el espliego, bajo las condiciones climáticas que se avecinan, destacando que “no podemos gestionar el monte como hace 50 años, puesto que si queremos conservar estos recursos y sus aprovechamientos, la gestión forestal adaptativa ya no es opcional, es obligada”.

Por otra parte, ha asegurado que “la ciencia también trae buenas noticias”, en el sentido de que al aplicar técnicas avanzadas de secuenciación de ADN para ver “lo invisible” en la salud del suelo, los investigadores han confirmado la presencia en las tres sierras de hongos del género Terfezia, conocidos popularmente como trufas del desierto o criadillas de monte. “Este hallazgo tiene un potencial económico enorme, puesto que hablamos de un producto de alto valor gastronómico, muy apreciado y demandado en los mercados de Oriente Medio, que ya estaba ahí, bajo nuestros pies, esperando a ser valorizado de forma sostenible”, ha explicado el rector. En conclusión, Nicolás Ruiz ha afirmado que BioForeste “está enseñando” que la ganadería regenerativa, el aprovechamiento de la biomasa o la micorrización son mucho más que ‘técnicas ecológicas’, “son, en realidad, herramientas de pervivencia para nuestros pueblos”. “Hemos demostrado que cuando la administración —Diputación de Jaén, Ayuntamientos (Bedmar, Huesa, Villarrodrigo), Gobierno de España— y la ciencia —la UJA— caminan juntas, somos capaces de convertir el reto demográfico en una oportunidad de desarrollo. También hemos de crear conciencia de que proteger el medio ambiente y crear empleo no son objetivos opuestos; son, como demuestra hoy BioForeste, las dos caras de la misma moneda”, ha concluido. La jornada ha contado además en su apertura con las intervenciones del alcalde en funciones de Huesa, Manuel Moreno Padilla, el alcalde de Bedmar-Garcíez, Enrique Carreras Fresno, y la teniente de alcalde de Villarrodrigo, Sonia Palomares.