El Jaén Rugby sabe sufrir para lograr su segundo triunfo de la temporada
Jaén Rugby ha conseguido su segunda victoria de la temporada en la División de Honor B masculina. Una victoria trabajada bajo la lluvia en la que el equipo consiguió superar la presión de su rival y la de su propia ansiedad. Los cinco puntos obtenidos este domingo gracias al bonus ofensivo sitúan a Jaén Rugby en quinta posición, a dos puntos de tercero y cuarto clasificados. CR Málaga llegaba a Jaén con urgencias. Colista y sin puntos, puso toda la carne en el asador desde el saque inicial para complicar el partido a Jaén Rugby. Los jiennenses se encontraron con esa oposición y con la dificultad añadida de una mañana lluviosa. No obstante, su superioridad en las fases estáticas —melé y touch—, unida a un juego a la mano ágil les permitió llevar el oval a campo contrario casi desde el inicio. A los cinco minutos, Manu González consiguió los tres primeros puntos para su equipo transformado un golpe de castigo (3-0).
A pesar del dominio jiennense, el reloj avanzaba sin que el marcador se moviese. Las percusiones de Juanmi Sánchez, de Manan Pérez y de Ocaña rompían la barrera defensiva, el balón circulaba, pero faltaba acierto en los metros finales. Los malagueños también jugaban, claro, repelían esos ataques y, además, empataron en el partido en el minuto 21 con otro golpe de castigo (3-3). Con el empate llegaron los nervios y el run run en una grada llena de público a pesar de la lluvia. Murmullo que se traducía en gritos de ánimo con cada arrancada de los delanteros locales y carreras de los tres cuartos, como una de Agus Bellati que enfilaba el ensayo cuando el colegiado consideró que el pase recibido era adelantado. También los visitantes tuvieron su oportunidad, pero la defensa jiennense desbarató esa opción casi sobre la cal.
Hasta dos veces llegaron los ataques de Jaén Rugby a cinco metros de la línea de ensayo malagueña. Fue a la tercera cuando Ocaña, José Carlos Moral, consiguió el posado cerca de palos. Jugada construida con paciencia y el acierto que había faltado en los intentos anteriores. Los gestos de celebración del segunda línea jiennense lo decían todo: un ensayo liberador para él y para sus compañeros (10-3). Sin embargo, el marcador ya no se movería hasta el descanso a pesar de los esfuerzos de ambos conjuntos. CR Málaga consiguió que se jugará en campo jiennense en unos últimos minutos donde el balón parecía, permítanme el símil, una trucha recién pescada. En la segunda parte, Jaén Rugby convirtió la tensión en intensidad. El saque inicial se convirtió en toda una declaración de intenciones. “Cheto” Enrique, siempre veloz, casi lo recepciona en la veintidós rival. Y a partir de ahí, una sucesión de jugadas, saques laterales, rucks, melés y golpes de castigo. Todo sin salir apenas de esos veintidós metros.
El segundo ensayo llegaría a la salida de una melé a cinco metros de la zona de marca. El balón le llegaría a Cheto Enrique que, por potencia y velocidad, sumaría sus primeros cinco puntos bajo palos (17-3). La amarilla a Agus Bellati poco después frenó la reacción jiennense. Un placaje alto que CR Málaga aprovechó para sumar otros tres puntos (17-6). El XV de la Costa del Sol no tuvo más opciones que estos golpes de castigo para recortar la distancia en el marcador. Jaén Rugby sí. Incluso con un jugador menos supo encontrar la superioridad por el ala para que Luis Alberto Enrique anotará su segundo ensayo cuando la lluvia arreciaba de nuevo (24-6). Una lluvia que hacía más valiosas cada recepción de los pases largos que Manu Torres o Javi López enviaban a sus tres cuartos. En esa fase del partido llegaron los tres últimos puntos de CR Málaga, aprovechando el golpe pitado al joven Pablo Román por tirarse sobre un ruck (24-9).
Si hace unas líneas alabábamos la seguridad en los pases, es de justicia aplaudir cómo recibía Manu González -zaguero en esta jornada- cada balón pateado por los jugadores malagueños. Balones decisivos con los que conseguía devolver el peligro a un rival que intentaba ahuyentarlo con el pie. El propio zaguero aprovechó una de esas jugadas para conseguir un ensayo. La carrera de “Cheto” Enrique había roto las dos cortinas defensivas de CR Málaga y, cuando fue placado, los jienenses solo tuvieron que hacerlo llegar al costado contrario del campo para que Manu lo posara. Conseguir dos ensayos con un jugador menos y con lluvia tiene mucho mérito. Cómo transformar todos los ensayos de tu equipo, como hizo Manu González (31-9). Dieciocho puntos consiguió el jugador de la cantera.
Ya con quince jugadores en el campo, el equipo de casa se lanzó a consolidar ese punto bonus que te da superar en más de tres ensayos a tu contrincante. Y lo hizo con doce de ellos formados en la cantera de Jaén Rugby. Entre esos jugadores, Edu Sánchez que jugaba sus primeros minutos con el senior en DHB. Enhorabuena. No era de extrañar, por tanto, que el último ensayo lo anotara uno de ellos. Lo hizo Juan Navarrete, el capitán, a cinco minutos del final. Fue una jugada larga que comenzó con una melé ganada a los malagueños a la que el equipo dio continuidad con diecisiete pases en cuatro fases y moviéndolo de lado a lado hasta encontrar sólo al capitán junto al banderín. No le importó a Manu González. Pasó la transformación entre palos como todas las demás (38-9). Podría haber sido él el MVP del partido, pero el trofeo al mejor jugador se lo concedieron a la combatividad de Manan Pérez.
Poco más que contar hasta el pitido final del colegiado Miguel González. Los cinco puntos conseguidos permiten a Jaén Rugby adelantar a RC Majadahonda en la clasificación y acercarse al grupo que persigue a los dos equipos de cabeza: Hermo Soto del Real y CAR Sevilla, próximo rival de los jiennenses.