Los Toreros Muertos llegan a Jaén este jueves para revivir los 80

Pablo Carbonell asegura que “todo será nuevo” en el concierto de La Alameda
Los integrantes de Los Toreros Muertos, que actuarán el próximo 17 de octubre en el Auditorio de La Alameda.
Elisabeth Ruiz Martínez

LA ENTREVISTA

Este jueves, 17 de octubre, el Auditorio de La Alameda será el escenario de dos de los grupos más importantes del panorama musical en español: Los Toreros Muertos y Los Inhumanos. Los asistentes disfrutarán de unos temas legendarios, pero además, cantarán junto a estos grandes artistas las canciones más actuales. “La gente atesora los temas porque, cuando los escucharon, la parte artística se les despertó y pensaron: “Si estos tíos lo hacen yo también podría hacerlo”. Es un poco lo que pasó con Picasso, salvando las distancias. La gente al ver tanto garabato se puso a pintar. Lo que pasa es que, como él mismo advirtió, para romper las normas hay que conocerlas previamente, que es algo de lo que no estoy muy seguro que nosotros supiéramos, la verdad”, afirmó Pablo Carbonell, integrante de Los Toreros Muertos, quien cuenta en detalle en Diario JAÉN cómo será la esperada actuación.

—¿Cómo ha sido la acogida de “El fútbol femenino necesita tranquilidad”?

—Este es un tema que desde el momento que lo escribí empecé a cantarlo. Y como más bien es una broma sobre las canciones himno, la gente la canta desde el primer día. Es un tema que no hay que tomarse en serio y soy consciente de que en el fondo es una gilipollez. Sólo espero que la gente pueda utilizarla para reflexionar y mejorar su vida personal, la otra, la laboral se va a quedar igual.

—¿Cómo se han desarrollado los últimos conciertos en América?

—De la misma forma que “Siniestro Total”, dicen que menos mal que nos queda Portugal para Los Toreros Muertos, que exista América no sólo nos permite seguir el activo, sino también la razón por la que seguimos juntos. Cada vez que empezamos a diluirnos en la molicie abandonamos los hábitos de limpieza y diligencia y surge una llamada trasatlántica y nos ponemos el traje de los domingos y vamos para allá. Por lo tanto tenemos una relación que roza el incesto con el público americano.

—¿En la actuación del próximo día 17 incluirán alguna novedad?

—Yo suelo pedirle a mi banda que por favor no hagan lo que hicieron en la última actuación. Es una costumbre de Los Toreros Muertos hacer las cosas como si fuera la primera vez. Así que todo lo que hagamos en Jaén será nuevo, aunque al público le parecerá que ya lo había oído.

—¿Cómo describiría los conciertos del grupo?

—Es la manera más efectiva de quitarse años que yo conozco. Si alguna vez fuimos felices, es un retorno a aquella época. En nuestro primer gran concierto en 1986 en el Rockodromo, Pedro Touceda, mientras entraba en volandas en el camerino, me preguntó a gritos lo mismo y le respondí sin pensarlo que éramos un cajón de juguetes que se desparramaba, pues eso mismo seguimos siendo.

—¿Qué se van a encontrar los jiennenses? ¿Y que esperan ustedes de ellos?

—Van a encontrarse con una banda que potencia el lado teatral de las canciones, que intenta dinamitar las distancias con el público y que se empeña en comunicarse como lo harían dos amigos. Esperamos que la gente nos reciba con los brazos abiertos.

—¿Ya tienen el repertorio?

—Sí, no faltará ninguna de las canciones legendarias conocidas y las que se cuelen nuevas parecerán conocidas. Hemos grabado un disco con doce canciones nuevas y es muy probable que “El fútbol femenino necesita tranquilidad” y alguna más se cuelen en el repertorio.

— Después de cuatro décadas, ¿cómo han hecho para mantener la esencia?

—El sentido del humor es como el escabeche, un conservante estupendo.