“Cada Lunes de Aguas”, un refugio entre lo real y lo desconocido

LA ENTREVISTA

Juan José Montiel Gálvez, escritor y periodista de Alcalá la Real, ha ganado recientemente el prestigioso Premio Internacional de Cuento Ignacio Aldecoa con su relato “Todas las tardes había fiesta”, un galardón que ha reconocido su talento y consolidado su carrera literaria. Tras este reconocimiento, el autor ha dado a conocer su primer libro, “Cada Lunes de Aguas”, que reúne diversos relatos en los que lo rural y lo urbano se funden, creando un universo narrativo marcado por el misterio, el cinismo y la reflexión sobre la condición humana. Entre esos relatos, el libro incluye el texto ganador del certamen.

—¿Cuándo comenzó a interesarse por la escritura y qué le motivó a empezar a escribir?

—Aproximadamente hace unos 10 años comencé a escribir. Además, me dedico al periodismo en Alcalá la Real. La escritura siempre había estado presente en mi vida, pero fue en torno a 2015 cuando empecé a participar en algunos concursos literarios. Comencé a ganar premios y a partir de ahí mi dedicación creció.

—Recientemente recibió el Premio Ignacio Aldecoa por un relato que incluye su libro. ¿Qué significó este reconocimiento?

—Este premio ha sido un gran espaldarazo para mí, especialmente porque es uno de los más importantes en el ámbito del relato corto en España. Tiene una trayectoria de más de 40 años y, además, ha supuesto un trampolín en mi carrera literaria. El premio conlleva la publicación de mi primer libro, “Cada Lunes de Aguas”, que salió a la venta el 3 de marzo. Fue una gran satisfacción poder recibirlo la pasada semana en el Festival Internacional de Cuento Literario de Vitoria.

—¿Qué relación tiene el relato con el que se alzó con el premio, “Todas las tardes había fiesta”, con el resto de textos del libro?

—Este relato tiene un perfil algo diferente al de los otros, ya que tiene menos elementos rurales. Creo que el jurado se sintió identificado con él porque aborda los claroscuros del éxito, especialmente en el caso de una escritora que, tras alcanzar el estrellato, cae en el olvido y la miseria. Aunque este relato también tiene un componente de misterio, se distingue por su enfoque en el destino trágico de los personajes. A pesar de sus diferencias, guarda ciertos elementos en común con los demás.

—”Cada Lunes de Aguas” se ha descrito como una colección de relatos que exploran el contraste entre lo rural y lo urbano. ¿Cómo definiría su estilo?

—Es una colección de relatos que, efectivamente, exploran lo rural, especialmente la España vacía, pero también incorporan elementos de realismo mágico. Mi estilo de escritura ha sido influenciado por muchos autores. Soy un lector empedernido, y muchos escritores han dejado su huella en mi obra. El libro tiene una parte de misterio, y las historias que incluye son muy variadas.