Las apariencias

Una fotografía de los representantes de Jaén Merece Más en el estreno del Festival de Otoño siembra la polémica en las redes sociales y abre el debate de cómo deben vestir los políticos

10 oct 2023 / 09:24 H.

Dicen que no sólo hay que serlo, sino también parecerlo. También que las apariencias engañan y que pocos ven lo que somos, pero todos ven lo que aparentamos. Hay una frase mítica en el Quijote que reza: “No andes, Sancho, desceñido y flojo, que el vestido descompuesto da indicios de ánimo desmalazado”. El caso es que el atuendo, que tiene su raíz etimológica en “attonitus” y que significa “el conjunto de vestidos y adornos que lleva una persona”, es tan importante en política como la oratoria. La vestimenta refleja múltiples rasgos de la personalidad, el estilo y la idiosincrasia de cada ser humano. No hay reglas mágicas y sí libertad absoluta en esto del atavío, pero existe un protocolario modo de vestir ligado estrictamente con la ideología. Sirva la perorata del comienzo de este texto para introducir la polémica suscitada en las redes sociales por una fotografía, tomada y publicada en el estreno del Festival de Otoño de Jaén, en el que la mezcla entre el aspecto físico de unos y de otros deja claro que hay normas no escritas que cada cual las interpreta a su manera. Independientemente del partido al que representan quienes en la imagen (que vale más que mil palabras) se encuentran en el punto de mira, está el decoro de quienes asistieron a un acto público de la categoría de una Catedral y de una ópera con la ropa a la que acudieron al supermercado. Todo suma y todo resta en esto de la política.

No es la primera vez que salta la chispa de la crítica social motivada por el ropaje. La irrupción de nuevas siglas que pusieron fin al bipartidismo en España hace unos años tuvo su entrada triunfal en un Congreso de los Diputados en el que empezaron a verse las mangas de camisa, los vaqueros y las zapatillas de deporte. No es ni debe ser lo habitual cuando quienes se sientan en el lugar elegido por los ciudadanos pretenden dar ejemplo de saber estar a las futuras generaciones, una máxima que tiene su traslado al terreno de lo local. Tan importante es el mensaje que lanzan los representantes de las administraciones públicas como sus apariencias, una lección que bien aprendida tiene también el nuevo Partido Popular, porque no hay que olvidar que en todas las casas cuecen habas, incluida en la sede de la calle San Clemente, donde alguna que otra llamada al orden hubo por los vaqueros desgastados de quienes tienen la batuta en la mano. “Parecéis de Podemos”, llegaron a decir desde Sevilla, aunque haya quienes nieguen la mayor.

La comunicación verbal tiene el mismo peso, en la actualidad, que la no verbal, de tal forma que en las campañas electorales hay una tendencia clara de los candidatos hacia el cuidado de su imagen y la selección escrupulosa del estilismo. Hay investigadores que corroboran que la moda tiene su propio lenguaje que sirve para interpretar lo que quieren decir las personas cuando lucen de una u otra forma. Del mismo modo que no vestimos igual para una fiesta que para hacer deporte, los políticos tampoco lo hacen. El atuendo se adapta a cada circunstancia y, por ejemplo, en épocas de recesión económica, cuando los ciudadanos tienen que apretarse el cinturón, cualquier ostentación aleja a los aspirantes a ganar de sus votantes.

Al grano. El presidente de Jaén Merece Más, Juan Manuel Camacho, y el teniente de alcalde, Manuel Carlos Vallejo, son los que están en el punto de mira por cuestiones que no hace falta explicar si se aprecia la fotografía. El problema de fondo es que una cuestión tan nimia y tan importante a la vez como la indumentaria es lo que hace que Jaén siga donde está, con urgencias que eclipsan prioridades mucho más profundas para despegar. Apariencias.

Las apariencias

Quién será el que le ponga el cascabel al gato del tranvía

Protagonizó el alcalde de Jaén, Agustín González Romo, el último desayuno informativo organizado por esta casa para hacer balance de los cien días de Gobierno municipal y, como no podía ser de otra manera, una de las preguntas realizadas por los internautas estuvo relacionada con el tranvía. Los jiennenses quieren saber cuál será la fecha de su reactivación y, sin embargo, no hay quien le ponga el cascabel al gato. Lo único que se sabe es que en seis meses tienen que estar terminados los trabajos relacionados con el arreglo de todos los desperfectos, que no son ni pocos ni muchos, depende del cristal con el que se mire. Del resto nadie se atreve a dar una fecha en firme. Hay temor a poner en funcionamiento una infraestructura viaria que supondrá un cambio integral de mentalidad por parte de los jiennenses, porque está claro que el tranvía invitará a dejar el vehículo particular en casa para usar el transporte público, donde la convivencia con los autobuses tendrá que ser como el pan nuestro de cada día. Lo primero será despejar las vías que actualmente funcionan de aparcamiento y después enseñar a los conductores a circular con un trazado en el que hacen falta muchos metros de frenado. No será nada fácil.

EN CORTO. Mañana, Consejo Local de Igualdad

El Partido Socialista, apoyado en una decena de colectivos feministas, tiene en el punto de mira a la concejala de Igualdad, María Segovia, por los cuestionables mensajes que lanza en las redes sociales relacionados con la violencia de género. No está la edil en su mejor momento para la crítica por cuestiones personales que la mantendrán alejada del foco mediático en cuestión de días, por lo que el alcalde, Agustín González, ha cogido el toro por los cuernos y ha convocado para mañana un Consejo Local de Igualdad en el que todos esperan que dé las explicaciones oportunas y quede zanjada la polémica de una vez por todas.