La Justicia deniega una incapacidad a un aceitunero

Un vecino de Martos no se sale con la suya al negarle dos sentencias, la última del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), que la incapacidad que solicitaba se deba a causas laborales, sino que derivan de enfermedad. Según relata la resolución del TSJA, el aceitunero trabajaba al jornal como vareador el día de los Inocentes de 2016. En el tajo tuvo cierto malestar y escalofríos, pero terminó con normalidad. Por la tarde continuaban las molestias y la siguiente jornada iba a trabajar pero finalmente no lo hizo. Llamó al 061, que lo asistió y luego acudió al centro de salud, donde estuvo más de seis horas. Ante su hipoxemia los facultativos decidieron trasladarlo de urgencia a un hospital de Jaén. Llegó con un cuadro de catarro, con aumento de la dificultad para respirar y sin fiebre. El diagnóstico, síndrome coronario agudo evolucionado, lo llevó a la UCI. Se determinó que llevaba 48 horas con disnea progresiva. Ese mismo 29 de diciembre se emitió la baja médica por infarto de agudo miocardio derivado de enfermedad común.

A instancia del vareador se comenzó expediente de determinación de contingencia. Posteriormente la dirección Provincial de la Seguridad Social de Jaén acordó que la incapacidad temporal derivada de accidente de trabajo. Sin embargo, la mutua de la empresa para la que prestaba servicio de recolección se mostró disconforme y presentó una demanda. El juzgado de lo Social número 1 de Jaén dio la razón a esta denuncia, por lo que el afectado presentó un recurso ante el TSJA por supuesta infracción jurídica al entender que el proceso de incapacidad era consecuencia de un accidente de trabajo y no de una dolencia previa. Ahora el Alto Tribunal Andaluz vuelve a confirmar la resolución inicial, lo que supone un varapalo para las pretensiones del jornalero. Deja claro que no hay nexo entre los problemas de la salud y la tarea como peón.