Jornada radiante y de altas temperaturas en el Corpus

Los vecinos disfrutan de la belleza del recorrido del Santísimo Sacramento

25 jun 2019 / 16:48 H.

Los galdurienses disfrutaron de una mañana donde el Santísimo Sacramento recorrió las calles de la ciudad. Este año, la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción fue la sede canónica desde la que el Corpus Christi se encontró con los vecinos de la ciudad, ya que el próximo año lo hará desde la iglesia de Fátima, con la que se turna para la celebración. En esta ocasión transitó por la Plaza de España, General Fresneda, Colón, Altozano, Cervantes, General Fresneda y Plaza de España, para acceder al interior del templo y poner punto final a una procesión que se realizó bajo las altas temperaturas. Aunque a primera hora de la mañana el termómetro dejaba unas temperaturas agradables, a medidas que fue acercándose al ecuador del mediodía comenzaron a subir con fuerza, aunque sí es cierto que más bajas si se comparan con las que suelen hacer a estas alturas del calendario. Y es que la celebración de la Semana Santa en una semana tardía, casi a finales del mes de abril, retrasa las conmemoraciones del resto de festividades religiosas, como sucedió con Pentecostés o el Corpus.

Una vez instaladas las pertinentes señales que avisaban del corte de las calles por las que discurriría la custodia así como de la prohibición de aparcar en estas zonas, los vecinos se echaron a las calles para adornar las aceras y balcones con motivo de la citada procesión. Fue el caso de las calles Colón, Altozano y Cervantes, donde semanas antes habían tenido lugar reuniones vecinales para concretar cómo estarán exornadas las calles. Por eso, desde la misma tarde del sábado iban llegando palmas, alfombras y ornamentos litúrgicos con la finalidad de engrandecer el itinerario escogido para este año.

Desde la calzada hasta los balcones, no faltaron los espacios donde primó la luz y el color. El blanco de las sábanas prendidas en los balcones se mezclaba con el rojo de los gallardetes realizados por las vecinas con ocasión de esta festividad. De igual modo lo hacía la hierba esparcida por el suelo con el rosa de las adelfas que serpenteaban por las hojas de palma, una tradición que hunde sus raíces en siglos pasados y que todavía hoy sigue siendo señal de que Jódar vive una nueva mañana de Corpus Christi.

Durante el recorrido no faltaron las referencias al Sagrado Corazón de Jesús, de cuya protección se cumplen cien años de este hecho que tuvo lugar en el Cerro de los Ángeles, en Getafe, que contó con la presencia de la familia real. Es por ello por lo que los corazones con la corona de espinas estuvieron presentes durante el recorrido. E incluso la hermandad del Santísimo Cristo de la Misericordia lo hizo con la imagen del Sagrado Corazón.