—¿Tienen alguna esperanza de celebrar la Romería de San Julián en septiembre?

—Con la situación sanitaria que estamos atravesando es muy difícil tomar una decisión. También es cierto que esa incertidumbre es un rayo de esperanza, puesto que no se cierra la posibilidad de alguna celebración, siempre siguiendo las normas sanitarias establecidas. Así que tenemos alguna esperanza de celebrarla, pero sabemos que será de una manera muy distinta.

—¿Cómo suele celebrarse habitualmente la romería?

—Aunque en septiembre hay muchos actos en torno a nuestro Patrón, los días más destacados son el 5, Solemnidad de San Julián, y el domingo más próximo a ese día, que celebramos su romería. La hacemos con gran devoción y con una peregrinación hacia el poblado que lleva su nombre. Allí celebramos la Eucaristía y un día de bonita convivencia con todo el pueblo de Marmolejo.

—¿Qué actividades están realizando durante el confinamiento a través de redes sociales u otros medios?

—Durante este confinamiento, lo único que podíamos hacer y, de hecho, lo hemos realizado, ha sido publicar en nuestras redes sociales mensajes de apoyo que nos animaran a rezar por todos aquellos que lo estaban pasando mal con esta situación o han sido víctimas de la pandemia. Además, ahora que podemos tener algo más de contacto, queremos hacer una donación a Caritas Parroquial para ayudar a las familias más vulnerables de nuestro municipio.

—¿Cómo están viviendo el confinamiento y la desescalada en Marmolejo?

— En general, podemos estar orgullosos de nuestro pueblo y nuestra gente, puesto que durante el confinamiento todo el mundo ha sido muy respetuoso con las normas impuestas para nuestra salud. Ahora, en la desescalada, seguimos en esta línea de cumplimiento de nuestro deber siguiendo todas las normas que nos comunican.

—¿Qué ánimo quiere compartir con sus paisanos y con los devotos de la Virgen de la Paz y de San Julián...

—Pues es un mensaje de agradecimiento por cumplir las normas que van dictando. Con esta actitud ayudamos mucho más de lo que podemos imaginar y, por supuesto, les animo a que sigamos adelante y luchando contra este virus, poniendo nuestra confianza siempre en el Señor y en la intercesión y protección de nuestros Santos Patronos.

—¿Qué es lo que más le preocupa de esta crisis sanitaria?

—Muchas cosas. Todas las personas que han fallecido y siguen perdiendo la vida; todas las personas que trabajan incansablemente para que no nos falte atención médica, productos en los supermercados, seguridad... Pero lo que más me preocupa son las familias más vulnerables, que han perdido sus ingresos y les va a costar mucho trabajo poder salir adelante.

—¿Y del futuro inmediato?

—Creo que cambiará y mucho, o así debería ser. Ahora seremos más conscientes de lo importante que es la solidaridad, de la importancia de cumplir las normas, de lo esencial que es cuidar nuestro mundo. Hemos demostrado que en situaciones límite sacamos nuestro mejor lado e intentamos ayudar aportando lo que sabemos y tenemos.