Anochecida al calor de la hoguera en la comarca de La Loma

Los vecinos de Canena tuvieron ayer dos opciones de lidiar con el frío de enero por San Antón. La primera, acercarse a la hoguera encendida en el entorno del Auditorio “Antigua Estación”, que acogió la celebración de la sexta edición de la Carrera de las Antorchas; la segunda, participar, precisamente, en la prueba deportiva, que, más de un lustro después de su nacimiento, se ha convertido ya en una cita ineludible en el calendario canenero. Numerosos vecinos de todas las edades no dudaron en participar, desde las seis y media de la tarde, en alguna de las categorías —infantil, alevín, cadete y adulta— de esta carrera que, además, tuvo carácter solidario, dado que el precio para conseguir un dorsal fue la donación de un kilo o un litro de alimentos, así como gel y productos de limpieza para los más necesitados. Estos particulares atletas tuvieron su recompensa en forma de tortas, y chocolate, que degustaron alrededor de la hoguera.

Por otro lado, en Sabiote, las hogueras encendidas por los vecinos iluminaron los rincones del municipio. Hasta dieciséis lumbres fueron las que se prendieron durante la anochecida y la noche en honor de San Antón.