Allí donde la gente sí se queda y se vence a la despoblación

Un año más, el padrón de la provincia de Jaén se desangra. Según los datos reflejados en la actualización de los padrones municipales del Instituto Nacional de Estadística (INE), publicados a finales de 2021, la provincia jiennense contaba, el 1 de enero del año pasado, con 627.190 personas empadronadas sumando los vecinos de los 97 municipios, frente a las 631.381 personas a 1 de enero de 2020. Es decir, que en un año la provincia perdió 4.191 habitantes, un 0,66% de su población total. El dato no invita a la esperanza, menos aún en un contexto en el que no se deja de hablar sobre la necesidad de combatir la despoblación. Es reseñable el hecho de que todas las ciudades jiennenses más grandes perdieron vecinos entre 2020 y 2021. El padrón de Jaén capital disminuyó en 825 vecinos, hasta los 111.932 (-0,73%); el de Linares, en 828 vecinos, hasta los 56.525 (-1,44%); el de Andújar, en 403 vecinos, hasta los 36.212 (-1,1%); el de Úbeda, en 121 vecinos, hasta los 34.208 (-0,35%); el de Martos, en 72 vecinos, hasta los 24.271 (-0,29%), y el de Alcalá la Real, en 77 vecinos, hasta los 21.623 (-0,35%).

Sin embargo, hay 21 municipios rara avis que rompen con la tendencia provincial y en los que el padrón si experimentó un crecimiento entre el 1 de enero de 2020 y el primer día del recién extinto 2021. Constituyen una rotunda minoría, sólo el 21,6% de los 97 municipios jiennenses, y se trata de Aldeaquemada, Baños de la Encina, Beas de Segura, Bedmar y Garcíez, Cabra del Santo Cristo, Canena, Carboneros, Frailes, Génave, La Guardia, Hornos, La Iruela, Jamilena, Lupión, Peal de Becerro, Puente de Génave, La Puerta de Segura, Santisteban del Puerto, Los Villares, Villarrodrigo y Villatorres.

En términos absolutos, el que más creció fue La Guardia, que ganó 99 habitantes —desde los 4.983 de 2020 hasta los 5.02 de 2021, esto es, un aumento del 1,99%—, seguido de Los Villares, con 86 vecinos más —desde los 6.020 de 2020 hasta los 6.106 de 2021, es decir, un crecimiento del 1,43%— y Peal de Becerro, con 85 personas más empadronadas —desde las 5.240 de 2020 hasta las 5.325 de 2021, esto es, un 1,62% más—. En términos relativos, el municipio de mayor crecimiento poblacional fue Carboneros, con un aumento del número de personas inscritas en el padrón del 2,88% —desde los 591 vecinos de 2020 hasta los 608 de 2021, es decir, 17 personas más empadronadas—. Al municipio de Sierra Morena le sigue, de cerca, otro de la misma comarca, Aldeaquemada, cuyo padrón aumentó entre 2020 y 2021 un 2,31% —desde 476 hasta 487 vecinos, es decir, 11 más—.

De estos 21 municipios jiennenses en los que creció la población entre el 1 de enero 2020 y el mismo día de 2021, resalta que la mayoría, 17, tienen menos de 5.000 habitantes, una cifra que sólo superan Beas de Segura (5.115), La Guardia (5.082), Peal de Becerro (5.325) y Los Villares (6.106). Se trata de un dato significativo si se tiene en cuenta que, de los 97 pueblos de la provincia, 69 —es decir, la gran mayoría— suman menos de 5.000 habitantes.

Por comarcas, la Sierra de Segura, con seis, es la que cuenta con más municipios en los que creció la población. Le siguieron la comarca Metropolitana, con cuatro pueblos; Sierra Morena, con tres; Sierra Mágina, Cazorla y La Loma, con dos cada una, y la Sierra Sur y El Condado, con uno cada una. Pero en ninguna de estas comarcas el padrón experimentó un crecimiento. En términos absolutos, la que menos vecinos perdió fue Cazorla, con 127, mientras que la más perjudicada por la despoblación fue la comarca Metropolitana, lastrada por la capital, con 1.015 vecinos menos. En términos relativos, la que menos decreció fue también Cazorla, con un descenso poblacional del 0,41%, y la que más, Las Villas, con una pérdida del 1,43% de sus vecinos.