Espárragos a prueba de covid

La crisis del coronavirus supone un auténtico terremoto en la economía. A pesar de los temores, después de tres semanas de estado de alarma, el sector local del espárrago, a diferencia de lo que ocurre en la provincia de Granada, aguanta el tipo y resiste. De hecho, este año la principal novedad fue la constitución de la empresa Espárragos Alcalá la Real, vinculada con la firma Hermanos Golbano, uno de los gigantes del sector hortofrutícola.

En el caso de la flamante firma, su puesta en marcha supone la creación de decenas de puestos de trabajo. Uno de los socios, Jaime Aceituno, explica a Diario JAÉN que solo en la planta de manipulación, situada en la nave agroalimentaria que posee el Ayuntamiento, se emplea a más de sesenta personas. “Estamos superando las previsiones que había de producción”, indica. En este sentido, valora que cuando todavía no se ha alcanzado el apogeo de la campaña —algo que ocurrirá dentro de unos días, cuando suban las temperaturas— se recibe un volumen elevado de espárragos. Por ejemplo, ayer se superaron los 15.000 kilos. El artículo se vende tanto en España como en los mercados europeos.

Aceituno valora la calidad del género, con buenos calibres. El integrante de Espárragos Alcalá la Real subraya que, hasta ahora, tanto los precios —rentables en origen para el agricultor y con frecuencia por encima de dos euros por kilo— como la meteorología —con temperaturas suaves y sin heladas y algunas lluvias— han acompañado.

Las plantaciones, en su mayor parte, familiares, generan cientos de jornales, un recurso muy útil en unos tiempos en los que son muchos los vecinos del municipio que se han quedado en paro.

Una de las ventajas que tiene el espárrago es que es totalmente complementario con el olivar, pues las labores de ambos cultivos apenas se solapan. Por otro lado, en función de las condiciones meteorológicas, la hortaliza puede dar tarea entre los meses de febrero y mediados de julio. Incluso este año la nueva empresa prevé el “espárrago de verdeo”, es decir, el que se recoge en la recta final del verano, en virtud de un cambio de ciclo posibilitado por el riego de parcelas. La idea es desmarcarse de los momentos en los que los mercados se hallan más saturados. Este año se han realizado nuevas plantaciones en el término alcalaíno.

continuidad. Otra de las iniciativas empresariales destacadas, la cooperativa Los Gallombares, procedente del núcleo de Ventorros de San José, en el municipio granadino de Loja, vuelve a operar esta campaña con absoluta normalidad. El único cambio es que, al cederse las instalaciones municipales del Llano de Mazuelos a Espárragos Alcalá la Real, ha tenido que buscar un emplazamiento alternativo para la recepción del género, en este caso, la nave de la entidad de Mures.