“El secreto ha sido atender a la gente como Dios manda”
Confecciones Zafra bajará la persiana el día 30 después de más de 42 años
Corría el 19 de octubre de 1977 cuando Confecciones Zafra echó a andar en Alcalá la Real. Ahí comenzó una trayectoria de éxito, desde la calle Fernando el Católico, que está a punto de acabar. El cierre será el 30 de enero. ¿El motivo? La merecida jubilación de sus propietarios, Luis Zafra y Encarnación Hinojosa.
El negocio tuvo como prólogo una tienda de Frailes, que el matrimonio atendió durante tres años. Al principio, el establecimiento alcalaíno vendía artículos del hogar y de bebé y, en navidades, también juguetes. Sin embargo, Encarnación Hinojosa y Luis Zafra no tardaron mucho en centrarse en la ropa. En torno a un lustro más tarde de los comienzos, la actividad se desdobló. Ella comercializaba prendas femeninas en el bajo original —justo por encima del actual Calzados Lara— y él, masculinas en otro adquirido justo enfrente. Todo les fue tan bien que llegaron a tener hasta cuatro locales: Zafra Hombre, Zafra Mujer, Sport Jeans —igualmente en la “calle de la Discoteca— y otra en Alfonso XI. Precisamente Zafra Hombre será la última en cerrar, el próximo jueves.
“El secreto ha sido atender a la gente como Dios manda”, reflexiona Luis Zafra, mientras que su esposa subraya que nunca han tenido pereza y que han trabajado con la filosofía de no engañar al cliente y siempre con género de calidad. Lo dejan con 68 años y llevaban los tres últimos con la llamada “jubilación activa” en la que trabajaban media jornada. Están muy satisfechos con la experiencia y dan las gracias a los clientes, muchos de fuera de Alcalá, y a las personas que han trabajado con ellos durante estos más de 42 años.
La esmerada atención al cliente queda reflejada en una anécdota. El recordado erudito Enrique Toral viajaba, hace años, desde Madrid para participar en un congreso en Alcalá. Por el camino extravió el traje que iba a ponerse. Así que, con rapidez tuvo que comprar otro. Con rapidez, se consiguió arreglar las nuevas prendas, que pudo lucir en la cita cultural.
Sobre el futuro lo tienen claro: “Todo menos estar en la butaca”. Con ello se refieren a que harán otras cosas, como viajar más, estar con la familia —tienen tres hijos, Luis, Encarni y Paco, y unas nietas a las que adoran— o perfeccionar los conocimientos de informática, sin perder el contacto con la agricultura, a la que el progenitor se dedica como gran afición.
Sin embargo, el cierre de Confecciones Zafra no es un adiós, si no un hasta luego. Una sobrina de Luis Zafra, Ana María López, igualmente empresaria del sector les ha alquilado ambos bajos. Los propietarios detallan que la idea es cambiar el nombre, pero mantener la diferenciación entre la tienda de hombre y la de mujer. De esta manera tendrán continuidad unos locales señeros en una de la principales arterias del comercio de Alcalá la Real y su comarca.