Dos guardias civiles salvan la vida a una niña de dos años

Gratitud de la madre por la intervención del teniente y de uno de los sargentos

13 jun 2019 / 13:00 H.

Un Cuerpo de Seguridad al servicio de la ciudadanía, sobre todo en situaciones de emergencia. Componentes del puesto de la Guardia Civil de Alcalá la Real fueron fundamentales para que una niña salvara la vida. Según explican fuentes de la Comandancia, los hechos ocurrieron el pasado viernes, en torno a las once y media del mediodía. En el cuartel se personó una mujer de nacionalidad rumana, muy nerviosa y con abundante llanto, que pedía ayuda, ya que su hija estaba enferma y no sabía qué le ocurría. En este sentido, desde la Benemérita se explica que la menor se hallaba “muy rígida” y con espasmos continuos. Los agentes comprobaron que respiraba y alertaron con celeridad a los servicios médicos. Por teléfono, les comunicaron cuáles eran los síntomas que observaban. Incluso trasladaron en un vehículo a la pequeña. La progenitora los acompañó en el mismo coche. En un breve espacio de tiempo, el automóvil llegó hasta el servicio de Urgencias del centro hospitalario de alta resolución de Alcalá la Real.

La Comandancia de Jaén detalla que, en virtud de la información suministrada por teléfono, los sanitarios ya estaban preparados para atenderla. Los profesionales atendieron a la madre y posteriormente llegó el padre. Finalmente, después de ser estabilizada y de recibir asistencia en Alcalá la Real, la menor fue trasladada en ambulancia hasta Granada. La historia tuvo un desenlace feliz, pues la niña se encuentra en perfecto estado. Como gesto de agradecimiento y de reconocimiento, la progenitora se personó en el cuartel alcalaíno al día siguiente y regresó este lunes. Valoró la conducta ejemplar de los dos protagonistas de este caso de auxilio, el teniente Francisco Manuel García y el sargento, de orígenes santaneros Sergio Aceituno. Ambos mandos pese a su juventud, evidenciaron total cualificación para obrar ante situaciones de este tipo.

La progenitora, que prefiere mantenerse en el anonimato, relata a Diario JAÉN como vivió tan angustiosos momentos y manifiesta su gratitud hacia los dos integrantes del Instituto Armado y hacia los sanitarios que atendieron a la niña tanto en Alcalá la Real como en Granada. Como destaca en su relato, su descendiente se encontraba con síntomas de resfriado desde hacia tiempo. Dice que le dio el tratamiento y se la colocó en el regazo, como comenzó a experimentar convulsiones. Alarmada, la mujer, que reside en la calle Duque de Ahumada, subraya que la cogió en brazos, sin que ni siquiera llevara puestos los zapatos, dada la gravedad, y acudió, por su proximidad, hasta el puesto de la Guardia Civil, situado solamente a unos metros de su domicilio. Pone el énfasis en la repentina y preocupante subida de la temperatura, con una fiebre que de acuerdo con sus datos, se situaba en cuarenta grados. Conforme a su testimonio, la dolencia estaba causada por un virus que afecta especialmente a los niños y que ocasiona picos muy altos de calentura. Es algo muy peligroso, máxime en caso como este en pacientes de tan corta edad —la niña está a punto de cumplir los tres años—. Señala que después de lo acontecido, aunque la niña ha vuelto a clase, siempre está pendiente del teléfono móvil.