Documentación de la Casa Pineda directa al contenedor

Historia propia de un sainete o una trama de enredo. Personal de la empresa municipal Jardines y Medio Ambiente se encargó de arrojar, el jueves a mediodía, documentación a contenedores del recinto ferial, principalmente uno de papel. Dentro del recipiente, que quedó con la rejilla lateral levantada, podían observarse a simple vista, y cogerse, archivadores y carpetas de la Casa Pineda, sede del área de Desarrollo Económico. Dentro, lo que parecían facturas y otros documentos con datos de negocios de varias provincias y el extranjero. Al trascender el asunto, el contenedor azul “se evaporó”.

El asunto da lugar a un nuevo choque entre el PSOE y el Gobierno municipal del PP y Ciudadanos. El portavoz socialista, Carlos Hinojosa, recuerda que, semanas antes de las elecciones municipales de 2019, los populares, “con Marino Aguilera a la cabeza”, les acusaban de deshacerse de expedientes, pese a que el proceso tenía supervisión del responsable del archivo a través de una empresa pública habilitada para ello. “Hoy —por el jueves— Marino Aguilera y el Gobierno de las derechas debe dar explicaciones por el protocolo de traslado y destrucción de documentación que sigue el Ayuntamiento, así como información sobre la relación de documentos abandonados esta mañana en varios contenedores de papel y basura”, asegura. El líder opositor indica que, según la Ley, toda documentación ha de ser custodiada un mínimo de años, aspecto que debe controlar la Secretaría del Ayuntamiento. Hinojosa expresa su preocupación ante la posibilidad de que se hayan abandonado expedientes de forma indebida y por ello solicita saber quién autorizó el traslado de papel para ser abandonado en contenedores sin ser debidamente destruidos. Pide explicaciones y tacha de “muy grave” el asunto y de “escandaloso” que, horas después, uno de los contenedores desapareciera de pronto.

El primer teniente de alcalde y concejal de Empleo, Formación y Aldeas, Ángel Montoro, de Ciudadanos, sale al paso y detalla lo ocurrido. Puntualiza que se hizo limpieza en el almacén de la Casa Pineda y que toda la documentación salvo esa se destruyó. Sobre la naturaleza de los papeles en cuestión le resta importancia. Ante todo, deja claro que se trataba de documentos elaborados para un curso de administrativo polivalente para pymes, impartido en 2008 y 2009. Detalla que no eran documentos reales, sino archivos utilizados dentro de la simulación de una empresa —Bolsas y Embalajes NT— creada ficticia durante el curso, a través de una plataforma. Admite que dejar la documentación puede ser “un fallo”, pero recalca que en los documentos no hay contenidos ni datos reales. Acusa a Carlos Hinojosa de dar pábulo a la polémica y de levantar “una montaña” a partir de algo intranscendente. De hecho, señala que si el portavoz del PSOE le hubiera pedido información sobre lo acontecido la habría facilitado sin problema. Respecto de la retirada del contenedor en el que se depositaron los papeles, apunta que el objetivo era examinar qué era exactamente lo que había dentro.