Aislados por la nieve durante tres días en la aldea de Prado Moro

El reciente paso del temporal Gloria por la Sierra de Segura dejó en Santiago-Pontones imágenes bellísimas del vasto manto de nieve que cubre el municipio, pero también algunas situaciones terribles como la que afrontaron durante tres días dos de los tres únicos habitantes de Prado Moro, una de las aldeas de Santiago de la Espada, a saber, los hermanos Juan José y Ramón Fernández, y la madre de estos, que, precisamente, comparte nombre con la borrasca, cuyo eco aún resuena. Estos dos hermanos denuncian que, desde el pasado día 20 hasta ayer estuvieron prácticamente incomunicados del resto del mundo. Los culpables, el metro de nieve que inundaba la única vía de entrada y salida a la aldea y los pinos que cortan el paso a medio camino de la aldea vecina de Vites.

“Hemos estado incomunicados y nadie se hacía responsable”, manifiesta uno de los dos hermanos, Juan José Fernández, que, indignado, explica que él mismo tuvo que abrir un pequeño paso entre los pinos para poder salir de la aldea: “Cogí la motosierra que llevo en mi todoterreno y estuve cinco horas trabajando en ello. A estas circunstancias no les tengo miedo porque me he acostumbrado desde pequeño a ellas, pero esa no es la cuestión, sino que yo, con lo estrecho que es este carril, no tengo por qué jugarme el físico cuando hay profesionales que se tienen que encargar de eso. Nos tienen abandonados”. Fernández añade que, por suerte, su madre, de 87 años, se encontraba en Santiago de la Espada cuando cayó la nevada: “Pero imagínese que le pilla todo esto aquí, con nosotros. Si se pone enferma, ¿cómo la llevamos a algún médico?”

A la queja se une una prima de estos dos hermanos, Elia Fernández, que, aunque actualmente reside en Madrid, ha crecido junto al resto de su familia en Prado Moro. “Lo que ha pasado en esta aldea no es normal. Me parece un caso de abandono total. Mi primo me llamó ayer llorando por lo que estaban sufriendo. Ha sido vergonzoso”, manifiesta esta mujer que, además, cuenta que, tras haberse puesto en contacto con el Ayuntamiento, la Guardia Civil y el servicio de Emergencias 112, ningún organismo asumía ninguna responsabilidad para solucionar la situación: “Se pasaron la pelota de un tejado a otro, y yo he sentido impotencia y mucha rabia”, asegura. Por último, critica el aislamiento al que, según ella, está sometida Prado Moro.

Desde el Ayuntamiento de Santiago-Pontones, su alcalde, Pascual González, confirmó a este periódico que en la zona del valle del Zumeta, donde se halla esta aldea, es la Junta de Andalucía, a través del Grupo Tragsa, la que se encarga de retirar la nieve en casos como este y que, ayer, en torno a las tres y media de la tarde, ya se había despejado prácticamente por completo el camino afectado: “Antes se hacían siempre desde el Ayuntamiento esta clase de trabajos, pero esa es una zona en la que existen más dificultades en este sentido”, aclara.