Reto en torno a la cámara de cine

Cristina Mediero y Carlos Aceituno forman parte del equipo que rueda en Córdoba “El secreto de Lucía”

19 abr 2019 / 12:28 H.

Se atribuye al celebérrimo Orson Welles —experto alumbrador de aforismos y, por lo demás, director de cine— una sentencia que bien podría servir de bandera para los profesionales del mundo cinematográfico que no tienen el privilegio de formar parte de ningún selecto grupo de estrellas mediáticas —que constituyen, a pesar de ocupar más portadas, la gran minoría del sector—: “El enemigo del arte es la ausencia de limitaciones”. Y es que, si hablamos de genio puramente artístico, más allá de presupuestos y sueldos que invitan al mareo, y de superproducciones y taquillazos varios, está el afán inventivo al que alimentan la ilusión y el esfuerzo por aportar nuevas perspectivas y por lograr que hacer cine sea poco menos que un estilo de vida.

El pasado fin de semana, Córdoba acogió el inicio de la grabación del cortometraje “El secreto de Lucía”, producido por 16/20 Creaciones. En el equipo de los en torno a treinta profesionales que se han embarcado en esta nueva aventura se encuentran dos personas cuyos nombres son de sobra conocidos dentro del panorama teatral y cinematográfico jiennense: Cristina Mediero y Carlos Aceituno, la primera como actriz protagonista y el segundo como guionista. Ambos forman parte de ese conjunto de voraces artistas cuyas mentes se encuentran en constante ebullición creativa y que no dudan en integrar o impulsar toda clase proyectos que merezcan la pena.

Por la manera en la que hablan de “El secreto de Lucía”, este, sin duda, es uno de ellos. Aceituno explica que el corto se centra en la historia de dos hermanas gemelas que pertenecen a estratos sociales distintos, Alicia y Lucía. “Cuando se reencuentran”, señala, “sale a la luz un secreto que se encontraba muy guardado y que no debería haber visto la luz”.

La misión de dar vida a las dos hermanas la afronta Mediero, lo cual supone para la actriz un reto al que nunca antes se había enfrentado ante la cámara: el de interpretar a dos personajes completamente opuestos en la misma producción. “Está siendo complicado”, comenta Mediero, “pero lo estoy disfrutando mucho. Es la primera vez que he estado durante tanto tiempo preparando referencias: para cada una de las hermanas tengo una canción que me lleva a un estado o al otro, incluso eligiendo la ropa para cada una llega un momento en el que parece que me desdoblo, pero Raquel Toledo, la directora, me está ayudando mucho en todo”.

Y es que, precisamente, el motivo de que el rodaje se esté desarrollando en Córdoba es que Toledo —premio Córdoba a Escena 2016 y experta en coaching de actores—, aunque natural de Madrid, está afincada en la ciudad califal. “Tenía muchas ganas de trabajar con ella en cine después de haberlo hecho en teatro”, explica Mediero, algo que corrobora Aceituno: “Cristina me comentó que quería trabajar con una mujer en la dirección y me pidió que escribiera el guion”.

Todo este trabajo dará como resultado un corto cuyo estreno está previsto para finales de año. Será entonces cuando comience su distribución por festivales nacionales e internacionales.