Raudal de solidaridad para Togo

Altocastillo y Guadalimar logran que brote agua del pozo de Bodjondé

07 dic 2016 / 17:52 H.

Una iniciativa repleta de solidaridad. La Fundación Takeli, en colaboración con los colegios Altocastillo y Guadalimar, consiguen un raudal de esperanza para un poblado de Togo. El agua ya brota desde hace semanas en el pozo de Bodjondé (Togo) gracias a la aportación obtenida de actividades benéficas.

El pozo se erige desde hace varias semanas en un núcleo rural situado a unos 300 kilómetros al norte de Lomé, la capital de Togo. Los procesos de perforación, alumbramiento de agua y construcción de la estructura que lo alberga han sido posibles gracias a los fondos obtenidos por la comunidad escolar de los colegios colaboradores.

Durante el curso pasado, ambos centros educativos realizaron diversas actividades de carácter benéfico con el propósito de sacar adelante la iniciativa, cuyo coste superó los ocho mil euros y en cuya construcción también ha colaborado la empresa Solar Jiennense con la donación de un sistema de bombeo alimentado por placas solares. El “Proyecto Pozo” ha sido concebido como un sistema sostenible para abastecer las necesidades de escasez de líquido elemento para una población aproximada de mil personas concentradas en el entorno que durante la época estival carecen de ellos debido a la sequía o de acceso a un manantial con la suficiente profundidad para garantizar los niveles básicos de salubridad para su consumo.

Al mismo tiempo ya suministra las necesidades de una Escuela Agraria cercana donde se ha impulsado un negocio de cría de ganado porcino y aviar donde sus alumnos, además de aprender un oficio, reporten los suficientes beneficios para el mantenimiento y desarrollo de la propia escuela.