La Alegoría del silencio vuelve a lucir con su color

El cuadro de la Catedral puede verse estos días en Espacio La Rural

22 feb 2019 / 18:16 H.

El Espacio la Rural que la Fundación Caja Rural tiene en su oficina del Paseo de la Estación de Jaén, muestra la pintura Sagrada Familia. Alegoría del silencio, tras haber sido restaurada por Néstor Prieto. El cuadro, que pertenece a la Catedral de Jaén, puede contemplarse con su nuevo aspecto, que es el más similar al originario, al que se le han quitado barnices, repintes y la pátina de tiempo que lo ennegreció. Esta obra, según explicó Luis Jesús García-Lomas, gerente de Fundación Caja Rural de Jaén, es de autor anónimo y fue pintada en 1600 por alguien del círculo de la pintora boloñesa Lavinia Fontana, cuyo nombre destaca en el manierismo que cultivó Rafael. El original se encuentra en el monasterio de El Escorial y se titula Sagrada Familia con San Juanito. “Esta es una de las grandes piezas que posee la Catedral de Jaén”, precisó Luis Jesús García-Lomas. La restauración de la obra ha sido sufragada por la Fundación Caja Rural de Jaén.

El restaurador, Néstor Prieto, manifestó que este cuadro era uno de los más representativos de la Catedral de Jaén para ilustrar la exposición de Miguel Ángel. “El estado de conservación era similar al de obras de la misma antigüedad. Tenía bastantes levantamientos y se tuvo que hacer una fijación de la capa pictórica. Lo más interesante ha sido el proceso de limpieza. Se han retirado los barnices, que estaban envejecidos, con el tiempo amarillean y eso dificulta que se vean las tonalidades de la obra. Le hemos dado una nueva capa de protección que le da más luz a la obra y la podemos contemplar como era en origen”.

Por su parte, Rogelio Garrido, sacerdote becario de Asuntos Económicos del Obispado, incidió en que se trataba de una gran obra, fechada en 1600, que necesitaba una restauración. “Esta obra podía contemplarse en el Museo Catedralicio y, a raíz de la exposición sobre Miguel Ángel, se ha podido restaurar y sin la ayuda de la Fundación Caja Rural, como hace con tantas obras, no hubiera sido posible”. Prieto añadió que, tanto desde la Catedral como del Obispado, se firmó un convenio de colaboración con la fundación para acometer la restauración.

Esta pintura sigue con fidelidad el modelo de la de El Escorial, que fue encargada por el cardenal Francisco Pacheco a Lavinia Fontana, en 1587, cuando estaba en Roma. La obra recuerda al cuadro de la Virgen de Loreto o del Velo de Rafael de Sanzio.