El SOS que acabó en “engaño”

El último desahucio registrado en la capital termina con un piso desmantelado

02 jun 2017 / 12:16 H.

En la capital, se producen desahucios”. El desalojo de Gema Díaz Abolafia, el miércoles, constata lo que la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Jaén lleva años denunciando. “Tanto el Ayuntamiento, como la Junta han sido incapaces de atender las necesidades más básicas [de unos vecinos]”, reprochó el portavoz municipal de Jaén en Común (JeC), Manuel Montejo. Pero el desahucio de esta mujer que, a finales de abril, expresaba en las páginas de este periódico su temor a verse en la calle con su hija de 3 años, ha derivado en una situación que nadie imaginaba: un piso “desvalijado”, algunos de sus muebles y electrodomésticos puestos a la venta en la tienda on line de productos de segunda mano Wallapop y decenas de personas, defraudadas.

Cuando, tras 9 meses sin “pagar una sola” mensualidad de un alquiler de 365 euros y tampoco “luz y agua” —“solo la primera parte de la fianza”—, las autoridades judiciales devolvieron las llaves del piso a los propietarios, la imagen que estos encontraron fue desoladora. “Nos han robado todo. ¡Hasta el termo y los toldos!”, denuncia Mariana Laguna Figueras. Explica que alquilaron el inmueble a Díaz Abolafia porque tenían “un conocido en común”: “Mi madre le hizo un favor porque no encontraba nada. Tenía una hija pequeña, estaba separada y había sufrido maltrato”. Conocedores de la situación de la mujer, acordaron el pago de la fianza en dos plazos y asegura que le dieron facilidades para el cobro de las mensualidades. Pero estas se fueron acumulando y llegó un momento en el que —sostiene Mariana Laguna— la negociación fue imposible: “Solo recibíamos insultos y amenazas por whatsapp y acabamos bloqueándola”. En ese momento, contactaron con un abogado para desalojar a la inquilina. La resolución de desahucio se dictó en abril y se le dio un mes para dejar un piso que, ahora, está desmantelado. “Nos han dado un ‘zas’ en toda la boca”, sintetiza Laguna, que anunció que hoy interpondrán la denuncia correspondiente por un supuesto robo.

Gema Díaz Abolafia negó haber sacado del piso muebles que no fueran suyos: “Tengo el contrato firmado y no me dieron inventario. Tuve que comprar mis muebles, así que no me metan en ‘embolaos’. ¡No estoy para hacer tonterías en mis circunstancias!”. Pero la versión que dio a la PAH fue distinta. “Acusa a su expareja de haberse llevado las cosas”, indicó la portavoz de la plataforma, Ana Cárdenas. La PAH “se desvincula totalmente” de los delitos que, presuntamente, se hayan podido cometer y definió lo ocurrido como un “mazazo”. “Estamos muy decepcionados”, confesó Cárdenas. Ayer mismo, después de 10 días de búsqueda infructuosa, la PAH había encontrado a alguien dispuesto a alquilarle un piso a Gema Díaz Abolafia por 6 meses cuyo pago iba a cubrir Cáritas. La noticia de lo ocurrido abortó cualquier ayuda. “Hay cosas que no son defendibles”, simplificó Cárdenas.

un piso amueblado que está desvalijado

ahora. Una deuda de 5.000 euros, entre impagos de alquiler, luz y agua, y un piso que ahora está desvalijado cuando, nueve meses atrás, su dueña lo había alquilado “amueblado, con todas las comodidades y hasta cortinas recién puestas”. Esto es lo que han encontrado los propietarios del inmueble que alquilaron en septiembre a Gema Díaz Abolafia.