El SAT anuncia resistencia al desalojo del “Cerro Libertad”

Queda menos de un mes para que la Justicia ejecute la orden de desalojo que pesa sobre la finca “El Aguardentero”. La parcela, situada entre Jaén capital y La Guardia, permanece ocupada por el Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) desde el pasado 1 de abril. Los miembros de esta organización la rebautizaron como “Cerro Libertad”, para llamar la atención sobre la situación de Andrés Bódalo que, en aquellos momentos, estaba encarcelado. El propietario de esta enorme extensión de terreno, el BBVA, acudió a los tribunales para reclamar el desalojo de los “okupas”. Y el juez Antonio Valdivia le dio la razón el pasado verano. No obstante, su sentencia todavía no ha podido ser ejecutada. Es decir, la finca no ha sido recuperada por su legítimo dueño. El magistrado ha puesto una fecha tope para el desalojo: será el 19 de marzo, a las diez y media de la mañana: “Cualquier persona que se encuentre en el interior de la finca debe abandonarla”, explica su señoría en una providencia, en la que también advierte: “Se podrá requerir el auxilio de la fuerza pública si fuera necesario”.

El SAT está dispuesto a presentar batalla y anuncia movilizaciones para impedir que esta tierra siga baldía. El colectivo asegura que han remodelado el cortijo, que estaba prácticamente en ruina; que han puesto en marcha un huerto y que han conseguido que cientos de olivares que estaban casi secos vuelvan a producir. “No vamos a permitir que esto se pierda. No al desalojo”, dice el sindicato en su perfil de Facebook. De hecho, ayer realizaron una concentración de protesta ante la sede central del BBVA en la capital jiennense, ubicada en la plaza Deán Mazas. Una veintena de personas acudió a las oficinas con la intención de hacer saber a los responsables cuáles eran sus reivindicaciones. Sin embargo, se encontraron con dos vigilantes de seguridad que les prohibieron la entrada a las instalaciones. Antes de marcharse, y como gesto simbólico, uno de los manifestantes echó por debajo de la puerta un documento en el que se resumía todo el “trabajo” realizado en la finca durante estos meses. “No nos vamos a rendir. Vamos a defender el ‘Cerro Libertad’ con uñas y dientes”, explicó ayer Andrés Bódalo, que fue uno de los participantes en la protesta. No será la única acción reivindicativa que realice el SAT de aquí al 19 de marzo. El colectivo ha pedido ayuda de otras organizaciones y entidades con el objetivo de hacerse fuertes. Y no solo en el sentido metafórico de la expresión.

Los Cuerpos de Seguridad del Estado tienen claro que habrá que utilizar “la fuerza mínima imprescindible” para hacer cumplir la sentencia judicial dictada por el magistrado Antonio Valdivia. Durante todos estos meses, al menos una decena de personas han estado residiendo y trabajando de forma permanente en el cortijo de la finca “El Aguardentero”.