El Real Madrid vive una noche aciaga contra el Wolfsburgo

Los blancos se hunden tras recibir el primer tanto

06 abr 2016 / 23:34 H.

El Real Madrid salió muy tocado de su visita al Wolfsburgo (2-0) en el partido de ida de cuartos de final de la Liga de Campeones y tiró por la borda la euforia conseguida tras el clásico en un partido que ofreció una de las peores versiones de los merengues, obligados a una nueva remontada en el Santiago Bernabéu la próxima semana. El equipo de Zinedine Zidane, cuya temporada pasa únicamente por la “Champions”, fue una sombra de lo que mostró en el Camp Nou. Ante el teórico rival más fácil de los ocho supervivientes, el conjunto blanco salió muy herido de Alemania, donde volvió a cometer viejos errores, entre ellos en defensa. Danilo fue la diana de todas las críticas, pero no sólo el lateral brasileño, que fue un caramelo para Draxler todo el choque, también el resto de la zaga. Ni Sergio Ramos, ni Pepe, ni un desconocido Marcelo estuvieron a la altura de un partido plagado de importancia. Los blancos parecieron haber subestimado a un rival que fue mucho mejor de lo que decían los números. Los alemanes, que no tuvieron un buen comienzo, pronto revertieron la situación con inteligencia, sobre todo por la posición tan volátil de Schürrle, que volvió loco a Pepe y que forzó un dudoso penalti. Cristiano vio cómo le anulaban un gol en la primera jugada y Bale protestó un posible penalti que el árbitro italiano decidió no pitar. Un espejismo que se convirtió en bofetón unos minutos después. Del 18 al 25 los lobos se quitaron la piel de cordero y encarrilaron el pase a semifinales enviando un claro mensaje a los blancos.