El precoz lector, el “maestro” para los que escriben a diario

Juan Eslava Galán recibe un sincero y emotivo reconocimiento de Diario JAÉN

29 abr 2016 / 14:07 H.

Desde los cuatro años, leía de corrido y, cuando iba a ver a su padre al Casino de Arjona, lo ponía con un ejemplar de Diario JAÉN a juntar aquellas letras impresas en tinta negra sobre papel igualmente ennegrecido, para presumir “de lo bien que leía el chiquillo”. Ese es el primer capítulo de la historia que une al escritor Juan Eslava Galán al periódico. Una narración que, dentro de la celebración del 75 Aniversario, suma una página más. Es la del sincero, cariñoso y sencillo homenaje que Diario JAÉN quiso brindar a este autor imprescindible. Una crónica en la que estarán escritas en letras bien grandes que este es “un maestro en el que fijarnos los que nos dedicamos a escribir”, a comunicar, a diario, tal y como resaltó el director del periódico, Juan Espejo, en la presentación del acto. Y no podrá faltar en este relato esa entrega de Juan Eslava Galán a su tierra, la que ha reflejado mil veces en sus ensayos y novelas. Lo dirían todos los que tomaron la palabra durante el tributo y él, cuando cerró el acto, lo explicó como tan bien sabe hacer: “Uno escribe de lo que conoce. El novelista no tiene más que dos fuentes, lo que lee y los que vive. Y una parte muy importante de mi vida está aquí, aunque tengo una existencia errante entre Inglaterra, Barcelona, Sevilla y ahora Madrid. Nunca corté el cordón umbilical del que saco savia para escribir”. “Me enorgullece escribir de mi tierra”, apostilló. Una tierra que demostró que también se enorgullece de tenerlo como uno de sus paisanos más ilustres. Eso sí, habrá que dejarlo como jiennense sin concretar porque dos pueblos de “disputan” el ser el de nacimiento de Eslava Galán, el de su familia, Fuerte del Rey, y en el que se crio, Arjona. Fue el juego, la broma, la anécdota entre los dos alcaldes presentes en este tributo. “Vamos a dejarlo entre Pinto y Valdemoro”, rio el escritor que, como es habitual en él, supo sacar la sonrisa a su auditorio. Tomó aquello de Tolstoi de que la patria se enraíza donde habita la infancia y él recordó que la suya estuvo a caballo entre ambos pueblos, lugares a los que hoy se siente muy vinculado por los familiares y buenos amigos que conserva, además de por lo que dice el DNI.

Y a esos dos pueblos se sumó, más tarde, Jaén, cuando la familia se mudó a la capital. Ciudad en la que se escribirían nuevos capítulos entre la historia del, por aquel entonces, joven escritor y el periódico provincial. Recordó Eslava Galán, en el acto, cómo fue la primera vez que lo visitó, cuando aquella “fábrica llena de máquinas fragorosas, llena de olor a tinta y grasa” estaba en la Carrera de Jesús. Lo hizo de mano de un periodista que escribía en él, presente también en este homenaje, Vicente Oya. Allí, contó, le hicieron con la linotipia su nombre, un sello con el que durante años grababa sus libros. Poco después fue cuándo empezó a escribir e hizo sus “primeros pinitos en la prensa local”. Artículos que publicó en estas páginas y que recordó al llegar a este homenaje. Estaban en la exposición de legajos y fotografías del Archivo de Diario JAÉN que recorre su trayectoria, sorpresa que lo recibió, muy atento la visitó de mano del director, Juan Espejo; el presidente del Consejo de Administración, Eleuterio Muñoz, y los representantes institucionales que tomaron parte del homenaje, como fueron el diputado de Cultura, Juan Ángel Pérez; la delegada Pilar Salazar y los alcaldes de “sus pueblos”, Juan Latorre y Manuel Melguizo.

Solo faltaba, en este recorrido, como bromeó después el genial escritor, su foto como campeón de esgrima, copa en mano, y aquella foto de Primera Comunión, con cara de bobo, que publicó el periódico. Esas, dijo, fueron sus primera apariciones y, afortunadamente, nunca ha aparecido en las páginas de sucesos. Ya más en serio, Eslava Galán resaltó cómo le enorgullece que el periódico haya seguido y recogido, muy amablemente, su trayectoria a lo largo de los años. Y, cuando celebra sus 75 años de vida, Juan Eslava Galán se refirió a JAÉN, lo alabó como “la crónica de la provincia”: “No hay otra crónica más que la que ha hecho el periódico”. Quiso también el escritor hacer referencia al futuro de la prensa escrita que ya había hecho el director en su intervención —“Nuestros sujetos, nuestros verbos y nuestros complementos también saben a literatura en estado puro, como la de Juan Eslava Galán. Aquí, en Diario JAÉN, entendemos que el único futuro que tiene la prensa es que esté bien escrita, en el mundo de la comunicación actual cuando la noticia llega antes por otro medio, el recurso inequívoco de los periodistas que usan la pluma es escribir bien, crear belleza con el lenguaje y producir el placer del lector”, defendió Juan Espejo—. “Ya sabemos que hoy los periódicos, con la tecnología, están viviendo momentos difíciles. Pero, en una sociedad civilizada, no hay más salida que uno de sus valedores sean los periódicos, los que cuentan las cosas y nos permiten tomar el pulso del mundo en el que vivimos o en el que deberíamos vivir”, apostó el escritor.

Un futuro en el que, sin duda, Juan Eslava Galán, su literatura, su forma única de contar la historia, su deliciosa ironía y su compromiso con esta tierra, seguirá llenando páginas, las de este periódico y se escribirán nuevos capítulos de esa historia que lo une a él, la que nació cuando aquel niño mostraba sus dotes de lector, para orgullo de su padre, en el Casino de Arjona.