El Palacio de Viana se convierte en escenario

Recuperar lugares en desuso y llenarlos de arte y cultura, esa es la intención de Vientos del Tiempo, una agrupación teatral que se niega a renunciar al patrimonio de la provincia y busca que se conozca a lo largo de todo el territorio. Dentro de estas actividades, el fin de semana llevaron la obra El Rey Tiburcio y Compañía al Palacio del Marqués de Viana, una construcción renacentista que consideran un tesoro, aunque reclaman su mal estado de conservación actual.

La obra, en clave de humor y con una trama en la que el monarca intenta, sin éxito, encontrar pareja, reunió a un buen número de garcileños que rieron a carcajadas y a los que el calor no les impidió disfrutar de una divertida tarde.

Los componentes de la agrupación aseguraron que se trata de “un lujo” poder actuar en un lugar “lleno de historia, encanto y magia”, pues en esta construcción llegó a alojarse el rey Alfonso XIII. “ Cómo hemos disfrutado con un público maravilloso que no paraba de reír. Tenemos que volver, claro que sí, ya formáis parte de nosotros y nuestro palacio, porque es también un poco nuestro. Tenemos que conseguir que recupere su esplendor”, expusieron en sus cuentas de redes sociales en un mensaje de agradecimiento y reivindicación por igual.

ACCIONES. Dentro de sus actividades, también estuvieron presentes en Iznajar (Córdoba) y Torredonjimeno, a donde volvieron a su mercadillo para promocionar sus visitas teatralizadas, el Castillo y “los tesoros que se esconden en el interior de nuestro casco histórico”, en un trabajo continuo de dar a conocer su tierra. Y es que la agrupación apuesta por el teatro y la historia como una estrategia turística para la provincia.

Vestidos de época e interpretando a sus ya clásicos personajes, esto es, fieles al estilo que les ha traído tantos éxitos y reconocimientos desde 2008, buscan cada fin de semana hacer llegar la promoción de los diferentes puntos de la provincia y sus trabajadas obras teatrales. Un trabajo para que las generaciones venideras puedan disfrutar del patrimonio existente y las actuales gocen de actividades culturales y de ocio, estén donde estén.