El mundo rural toma la palabra

Encuentro de alcaldes de las zonas de montaña para definir lo que aportan sus municipios a la sociedad

03 oct 2018 / 19:35 H.

Una veintena larga de alcaldes de municipios rurales y de montaña de la provincia de Jaén participaron en un encuentro para definir el valor que aportan sus pueblos a la sociedad. Se abordaron cuestiones como el valor que estos pueblos y sus gentes aportan a la sociedad actual. El encuentro estuvo presidido por el presidente de la Diputación de Jaén, Francisco Reyes; que estuvo acompañado por el presidente de la Diputación de Huesca, Miguel Gracia, y el presidente de la Asociación Española de Municipios de Montaña, Francés Boya. Los ponentes expusieron el proyecto “SOST-Montañas, Modelos para la gestión sostenible de los ecosistemas de las regiones de montaña españolas”, con el objetivo de reflexionar y hablar con los alcaldes de las dificultades y problemas, pero también de las oportunidades que los municipios de montaña tienen, cuando el fantasma de la despoblación es una de nuestras principales preocupaciones, como manifestó Francisco Reyes. Y añadió: “Queremos que sean ellos, como verdaderos conocedores del territorio, los que hagan sus reflexiones para aportarlas a una estrategia común que se pueda elaborar en España en torno a este tipo de municipios”.

Reyes también aclaró: “Somos muchos los que estamos convencidos de que la gente quiere vivir en los lugares donde ha nacido, porque aunque hay otros que quieren salir y pueden hacerlo, no deben hacerlo por obligación”. Y reclamó “medidas específicas por parte de las distintas administraciones europeas, nacionales y regionales para poner en valor los recursos con los que cuentan y las oportunidades que tienen estos territorios”. Por su parte, el presidente de la Diputación de Huesca, Miguel Gracia, indicó: “Todo el mundo habla de despoblación ahora. Se ha puesto de moda ese elemento sobre la financiación autonómica. Pienso que, cuando alguien habla de despoblación habría que preguntarle ¿Usted qué ha hecho por la despoblación? Porque las administraciones locales nos encontramos muy solas, sobre todo los alcaldes, y en lo que podemos llegar las diputaciones provinciales atados por leyes del Estado que no nos dejan ni gastarnos nuestros propios recursos”.

Por otro lado, Francés Boya puso en valor el trabajo que, desde 2013, se realiza desde la Asociación Española de Municipios de Montaña para que “se reconozcan las zonas de montaña, del mundo rural en general”. Y añadió: “Estamos pidiendo que haya un debate sereno sobre lo que debe ser el medio rural en el siglo XXI en este país”. Boya recordó que la ayuda de la Fundación de la Biodiversidad del Ministerio de Agricultura les permite trabajar para definir cuál es el valor de estas zonas de montaña, lo que se conoce como infraestructuras ecosistémicas; un estudio con el que se pretende concretar “qué están aportando estos territorios al conjunto de la sociedad, para así poner en valor algo que se ignora”.

Unas leyes específicas

Miguel Gracia considera que, hoy, “no debería haber un parlamento, nacional o autonómico, que cuando haga una ley no vea cómo afecta al medio rural. Estamos legislando igual para Zaragoza que para el Pirineo, para Madrid que para Barcelona o que para el medio rural y eso no puede ser”. Añade: “Hay que diferenciar cómo afecta al medio rural, porque muchas veces esas normas que van bien para una gran ciudad son perniciosas para el territorio y sus gentes”.

Conocer la realidad

Francesc Boya señala que el objetivo es “determinar el papel de los bosques, los olivares y el de aquellos que con su trabajo alimentan a las personas de las ciudades, un papel que hay que poner de relieve y calcularlo”. Recordó que los italianos “ya lo han hecho; la aportación que sus bosques, ríos y todo lo que se consideran infraestructuras ecosistémicas tiene un valor anual de 99.000 millones de euros. Nosotros tenemos que seguir ese camino”.