El mandato concluye y no se licita la vigilancia de parques

La partida se incluyó en el borrador de presupuestos de 2019, sin aprobar

07 jun 2019 / 11:22 H.

En la ronda de presentación del borrador de presupuestos municipales de 2019, la asociación de vecinos de Expansión Norte, que preside Manuel López, se llevó una buena nueva. El concejal de Hacienda, Manuel Bonilla, hombre fuerte del actual equipo de Gobierno, en funciones tras las elecciones municipales del pasado 26M, les anunció, según se encargó de informar el propio colectivo vecinal, que se contemplaba la puesta en marcha de una licitación para volver a reincorporar vigilantes a los dos parques del Bulevar. Estos pulmones de la capital dejaron de contar con esta vigilancia a raíz de que, en enero de 2018, se decidiera prescindir de los siete profesionales que prestaban este servicio. De la mesa, los responsables vecinales se levantaron con la idea de que se iba a convocar, en el plazo aproximado de un mes, un concurso para que las empresas interesadas puedan pujar por atender esta necesidad. No fue así, como confirma López que aclara que, desde entonces, no tienen noticia de cuando hay intención de atender esta demanda ciudadana.

Hace un año, ya culminó, sin éxito, un anterior intento de la Administración local de encomendar a una empresa privada la vigilancia. Los espacios que iban a ser objeto de ese contrato eran los parques de la Ciudad de los Niños; La Granja; el Morales Robles; el Jardín Botánico; Juan Pablo II; el Seminario; la Alameda; La Concordia; el Cerro de las Canteras; Andrés de Vandelvira y El Neveral. La Unión Sindical Obrera (USO) ya había advertido, una vez analizado el pliego para este proceso, de que incumplía la Ley de Contratos del Sector Público, al darse prioridad a la oferta más baja, en lugar de a la calidad precio. En cuanto a la subrogación del personal que prestaba servicio en el Parque Andrés de Vandelvira, sin trabajo, definitivamente, desde marzo al haberse acabado el anterior contrato adjudicado por el Ayuntamiento, la organización mostró su convencimiento de que no se cumplen con los derechos de estos profesionales. El contrato ofrecido tenía una duración de 76 días, dos meses y medio, por un importe de 39.798,29 euros, con el impuesto de IVA ya añadido. En la memoria justificativa de este expediente se dejaba claro que no había posibilidad de renovar la relación contractual una vez expirado el plazo, con lo que, como se criticó, no era muy atractivo para las empresas. Además de ser una preocupación de los vecinos, por haber crecido las gamberradas y la inseguridad en estos espacios, la falta de vigilancia en los parques es usada, en más de una ocasión, como munición política contra el PP y su gestión al frente del Gobierno municipal. El concejal socialista Carlos Alberca, antes de las municipales, llegó a asegurar que el alcalde, Javier Márquez, había “timado” a los colectivos vecinales a los que prometió que antes del verano estaría en vigor el nuevo contrato de vigilancia de las principales zonas verdes de la ciudad. A una semana vista de la formación de la nueva Corporación, este asunto quedará, casi con toda probabilidad, para los nuevos gobernantes.