El Ayuntamiento asumirá la recaudación de la zona azul

Primer consejo de administración de Epassa, tras la reactivación de la empresa

04 nov 2017 / 10:05 H.

Cuatro meses después de que la Corporación municipal aprobara, en pleno, el cese de los liquidadores de la Empresa Pública de Aparcamientos (Epassa) y el nombramiento de sus nuevos administradores, ayer se celebró el primer consejo de la sociedad, que sorteó la liquidación in extremis. Como el edil de Personal había garantizado a CC OO, uno de los asuntos prioritarios en el orden del día de esta primera reunión fue la situación de la zona azul y su encomienda de gestión a Epassa, que el PP aprobó en el pleno del 30 de octubre de 2014. “Se va a incluir el estacionamiento limitado en superficie para hacer a Epassa más dinámica y ofrecer otros servicios a la ciudad”, adujo el concejal de Mantenimiento Urbano y presidente de la empresa pública, Juan José Jódar, en un comunicado.

No se puso fecha a la incorporación de la zona azul a los servicios de Epassa, porque “falta documentación y trabajo por hacer”. Pero el portavoz municipal de Jaén en Común (JeC), Manuel Montejo, explicó a este periódico se que elevó una propuesta de trabajo que deberá refrendar el consejo, de forma que, si todo va bien, en “no más de un mes” calcula que podría llegar a su fin la incertidumbre laboral en la que los empleados de la zona azul llevan 3 años.

Al término de la reunión del consejo, la concejal socialista Matilde Cruz criticó en un comunicado que Epassa asuma la gestión y los costes de la zona azul, pero no la recaudación de los ingresos (unos 60.000 euros mensuales), que asumirá el Ayuntamiento, ya que se trata de una tasa. “Podrían haber estudiado la gestión directa por parte de la entidad local y tenerlo en marcha desde hace años”, aventuró la edil.

Esos ingresos irán a parar a la caja única del Ayuntamiento y allí —añadió Cruz—: “Ya sabemos que la prioridad de pago que impone la ley es atender primero préstamos, sentencias, nóminas, etcétera, con lo que no hay garantías de que a Epassa llegue ese importe íntegro, que, además, sería muy beneficioso para su saneamiento”. La socialista comparó lo que ocurrirá con lo ya sucedido con el servicio de grúa, del que Epassa tampoco recibe los ingresos. “Esto ha motivado que dos años y medio después Epassa arrastre una deuda de 780.000 euros derivada de asumir los costes de la retirada de vehículos, el depósito municipal y el mantenimiento de personal y medios”, sin que el Ayuntamiento le haya transferido la recaudación.

Hablando de cifras, el consejo de administración de Epassa aprobó también las cuentas anuales de la empresa que —dijo Jódar— van a servir de “espejo para llevar a cabo la reactivación de la sociedad”. El edil criticó que el PSOE votó en contra y JeC se abstuvo, pero, aun así, salieron adelante.

la presión de los empleados

En la reversión del proceso de liquidación de Epassa fueron fundamentales las presiones de los trabajadores de la zona azul. El 1 de enero de 2015, sus operarios comprobaron cómo el equipo de Gobierno del PP incumplía el mandato que había dado al pleno para que Epassa gestionará un servicio que ha estado privatizado desde su creación.