Dos años de cárcel por intentar matar al portero de burdel

Apuñalaron varias veces a la víctima durante una discusión a las puertas del club

20 mar 2018 / 09:05 H.

Dos años de cárcel. Esa es la condena impuesta por la Audiencia Provincial para los hermanos Ricardo y José M. R., dos vecinos de Andújar que intentaron matar a puñaladas al portero de un prostíbulo ubicado en la conocida como “ruta de los burdeles de la Nacional IV”. Ambos admitieron ayer su culpa ante el tribunal de la Sección Segunda, que tuvo en cuenta las atenuantes de drogadicción y reparación del daño. Es decir, la defensa consiguió acreditar que sus defensas estaban bajo los efectos de las sustancias estupefacientes cuando cometieron los hechos y que, además, han pagado la indemnización a la víctima por las heridas que le causaron. Ambas circunstancias han supuesto una considerable rebaja del castigo que pasó de los siete años de cárcel que, inicialmente, solicitó la Fiscalía a tan solo dos.

La agresión se produjo en la madrugada del 1 de septiembre del año 2010, es decir, hace siete años y medio. Los dos procesados se personaron en el club “Los Olivares”, ubicado en el kilómetro 317 de la Autovía de Andalucía, en el término municipal de Andújar. Sobre las tres de la mañana, una hora después de que los hermanos entraran al local, se produjo una discusión en el exterior del prostíbulo. José M. R. y el portero del lupanar, un hombre de nacionalidad rusa, tuvieron más que palabras. Al percatarse lo que estaba pasando, Ricardo M. R. salió a la calle y amenazó de muerte al vigilante. Cada uno de los procesados sacó una navaja que guardaba entre sus pertenencias. Acorralaron contra la pared al portero y le asestaron varias puñaladas en el costado y en el brazo derecho. El hombre consiguió zafarse y refugiarse en el interior del club. Los hermanos lo persiguieron y también entraron al local. Todos sus intentos por localizar al vigilante fueron infructuosos. Pasados unos minutos, pusieron pies en polvorosa. Los hermanos se montaron en un coche y huyeron. Mientras tanto, varias personas trasladaron al portero hasta el Hospital Alto Guadalquivir de Andújar, donde tuvo que ser intervenido quirúrgicamente.

La Guardia Civil abrió una investigación. Desde el principio, los presuntos autores estaban identificados, sobre todo gracias al testimonio de una persona identificada en la causa como “testigo protegido número 1”. Sin embargo, no fue fácil dar con ellos y detenerlos. Ahora, más de siete años después, la Justicia consiguió sentarlos en el banquillo como presuntos autores de un delito de homicidio en grado de tentativa. La sentencia, dictada por conformidad, estima que los acusados tenían intención de acabar con la vida del portero y, por eso, lo apuñalaron. Gracias a las atenuantes de drogadicción y reparación del daño, los hermanos Ricardo y José M. R. consiguieron reducir el castigo prácticamente al mínimo que se recoge en el Código Penal. El juicio se resolvió en minutos. Los dos procesados admitieron los hechos y el fiscal cambió su escrito de calificación. No entraran en prisión, ya que el tribunal se comprometió a dejar en suspenso la condena siempre y cuando no vuelvan a delinquir en los próximos años. La resolución ya es firme.