Una marca con reglamento

La Indicación Geográfica Protegida (IGP) avanza con un necesario paso que supone la aprobación, por parte de la Junta de Andalucía, del reglamento para que pueda gobernarse. El Boletín Oficial de la Junta de Andalucía certificó la normativa para que se pueda avanzar en la constitución de sus órganos. Tras los diez años de trabajo de la Fundación de Productores de Aceite de Oliva de Jaén que consiguieron que la Unión Europea certificara esta necesaria marca que servirá de paraguas de calidad al mejor aceite de oliva virgen extra. De esta forma se dan nuevos pasos para que la IGP avance firme y esté constituida en el menor tiempo posible. Según sus responsables la tarea más prioritaria es abrir tres registros para la inscripción de todos los segmentos del sector que estén interesados en que la IGP les certifique con el sello de calidad, siempre que cumplan los exigentes criterios de calidad que se requieren. Ahora se requiere la alta participación de los productores para que este símbolo de calidad brille en todo su esplendor. Esta herramienta ha demostrado su valía en todos los sectores y era una denominación provincial para que los mejores caldos de la provincia estén ligados, precisamente, a eso a la provincia. Un marchamo único de calidad que se sumará al prestigio alcanzado ya por los aceites de aquí. Todo debe sumar para que el consumidor global sepa que los mejores aceites de España, como atestiguan los premios recibidos en los últimos años, tienen un origen claro. En este sentido, se espera una respuesta contundente del sector que no debe perder esta oportunidad, la tarea principal ya está hecha y la agilidad de las administraciones también es un hecho. Toca mover pieza.