Una brecha imperdonable

En la provincia de Jaén las mujeres cobran, de media, unos 2.297 euros menos que los hombres. Esta brecha salarial, comparativamente, no es de las peores de Andalucía, pero es lo suficientemente grande para que se fijen políticas que intervengan y acoten esta realidad en las empresas andaluzas y jiennenses. Los datos son tozudos, así, según consta en el informe elaborado con motivo del Día Internacional de la Igualdad Salarial, los 140.025 asalariados que hay perciben un sueldo medio de 13.478 euros, mientras que las 109.700 mujeres que están trabajando cobran 11.181, es decir, 2.297 euros menos. Además esta brecha salarial, según los datos del Instituto Andaluz de Estadística y Cartografía, aumentó en un año 100 euros. Por sectores, la industria es el que más brecha tiene con un 28%, el de servicios un 24 y la construcción el que menos, con un 19. Esta falla económica, esta desigualdad manifiesta incide directamente en muchos factores y forma parte de un contexto nada bueno para los derechos laborales de la mujer, sus pensiones futuras, pero también para la natalidad de un país y de una región como Andalucía que envejece a pasos agigantados. Con estas mimbres las posibilidades de crear una familia son más complicadas, máxime si a eso se une la precariedad laboral y que tampoco existen las mejores opciones públicas de conciliciación. En este contexto, sin embargo, aún sorprende que en otros países europeos, sobre todo nórdicos, las familias sean mucho más jóvenes y el número de hijos mayor. Para poder alcanzar esas cotas es necesario mayor inversión pública en guarderías, subvenciones a empresas para tener a las mujeres trabajadoras en un entorno laboral en que se pueda conciliar.