Por un modelo de ciudad

Aunque ahora se debate sobre los cargos o áreas de poder que conllevará el pacto de Gobierno entre PSOE y Ciudadanos, lo realmente relevante para la ciudadanía jiennense es el modelo de ciudad que se quiere tener en una capital en horas muy bajas. La caída en desgracia de Jaén es un proceso continuado en el que distintos equipos de gobierno fueron incapaces de revertir una tendencia de endeudamiento y de empobrecimiento de los servicios que se prestan a la ciudadanía. La última legislatura, entre lo más destacable de la acción política está el pagar las nóminas de los trabajadores del Ayuntamiento, una tarea, sin duda, complicada dado el nivel de asfixia financiera que tienen las cuentas municipales, pero que también ejemplifica la situación política. Difícilmente se puede cambiar la dinámica de una ciudad cuando las prioridades no pueden dirigirse a mejorar infraestructuras, servicios y proyectos para la misma. Por este motivo sería necesario, dadas las circunstancias que amenazan la gestión, un pacto de mínimos políticos, en el que estuvieran representadas cuantas más fuerzas políticas mejor, para preservar unas coordenadas básicas por dónde debe ir la capital de la provincia. Solo así se puede involucrar a colectivos, asociaciones y personas que quieren cambiar esta tendencia que mantiene a Jaén en un ostracismo que no se puede dar por bueno. En este sentido, el equipo de Gobierno recién elegido debería abrir las puertas a todos los colectivos para poder sumar voluntades para un cambio de tendencia. Y en este caso no hablamos, necesariamente o solo de política, sino de voluntad de escuchar y trabajar unidos por la ciudad.