Estrategia de presente y futuro

    27 mar 2023 / 09:02 H.
    Ver comentarios

    Lo que dijo el viernes en Jaén la viceconsejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos de la Junta de Andalucía, Amelia Martínez, es una verdad como un templo. Se suavizó la pandemia, afloró el dinero de Bruselas y es el momento de que los empresarios den un paso adelante para invertir, crear empleo y generar riqueza. Los fondos europeos son la mejor herramienta que tienen territorios con fuerte tendencia al desequilibrio y la escasez de convergencia para crecer a un ritmo más ágil que otros en los que la ruleta rueda sin que nadie tenga que forzarla.

    Las administraciones públicas con competencias en la materia están obligadas a facilitar los trámites para que quienes están dispuestos a invertir puedan pisar alfombra roja. Lo que no puede ser es que haya líneas de ayudas para compensar la subida de los costes energéticos, por ejemplo, y cueste más el papeleo que lo que pueda recibir un jiennense. Está claro que la transformación productiva de la provincia tiene que ir, obligatoriamente, de la mano de los empresarios, que son los principales protagonistas de la dinamización económica, pero sin palos en las ruedas ni obstáculos que impidan un movimiento que ya de por sí es demasiado complicado. Tanto los ayuntamientos, como la Diputación, la Junta de Andalucía y el Gobierno están obligados a poner a disposición todas las herramientas ofrece Europa para crear el ecosistema favorable a la generación de puestos de trabajo con la mayor calidad y estabilidad posibles, una máxima que no será viable si no hay estabilidad política y si no aumenta el grado de confianza del inversor en las administraciones públicas. Es necesario, eso sí, que los empresarios sean valientes y planteen propuestas estratégicas pensadas en el presente y en el futuro, no sólo para captar el talento, sino para lograr que todos los alumnos formados en la provincia tengan la opción de elegir entre quedarse o irse a la hora de plantear su proyecto de vida. El cambio de modelo productivo pasa por diseñar un buen proyecto como alternativa al monocultivo del olivar.

    Editorial