Modernidad

A veces se nos llena la boca de palabras con las que queremos presumir de modernidad, ecología, ahorro energético, sostenibilidad, y justo de eso quiero yo hablarles hoy, porque son muchos años que, gracias a compañeros comprometidos con la defensa del medio ambiente, cambié mi forma de pensar en los modos de movilidad de la ciudad. No olvidaré la primera vez que se me ocurrió hablar de tranvía en la ciudad de Jaén, década de los 90 del siglo pasado, ya llevamos retraso. Sí, lo de movilidad sostenible no es un concepto nuevo, el problema es que las políticas de movilidad en nuestra ciudad no han apostado nunca por el transporte colectivo, y no se trata de buscar culpables, que los hay, se trata de tomar una decisión colectiva y planificar la ciudad con el convencimiento de que el vehículo privado hay que dejarlo en casa y apostar por otros modos para desplazarse. Tanto por economía como por ahorro energético y sobre todo por evitar altos niveles de contaminación. ¿Pensamos en el Planeta o no? Es lamentable que cualquier acción encaminada a la modernidad sea siempre utilizada por los políticos como arma arrojadiza, en lugar de apostar por el bien de la comunidad y de un futuro ambientalmente sostenible. Apostemos por ese futuro, la esperanza es lo último que se pierde.