La puerta cerrada

Meditando sobre el aislamiento que sufrimos en esta Provincia, que se refleja incluso en el escaso eco que ha tenido, en los medios de comunicación nacionales, la noticia de los cortes de las principales carreteras de la provincia, llevados a cabo por los agricultores jiennenses, el pasado día 30, a los que apoyo incondicionalmente. Parece que Despeñaperros se convirtiera en una puerta, esta vez, cerrada que no permitió llegara nuestro grito desesperado y rotundo al resto del país, lamentable. Me pregunto, qué habría que hacer para que se nos oyera, porque la histórica Puerta de Andalucía, cuyo significad, claro y profundo, ya se desvirtuara con el trazado del AVE de Sevilla a Madrid y que el trazado de Granada ha venido a confirmar que, gobierne quien gobierne en Madrid o Sevilla, se nos ignora y ningunea. Si con las infraestructuras ferroviarias, eléctricas y de cualquiera de sus formas, de las que se dota a otros a los que se potencia y allana el camino, igual porque el único accidente geográfico que lo impide es Despeñaperros, ¿por qué no cerramos esa puerta de verdad?, es posible que, para que alguien se acuerde de esta tierra agraviada y abandonada, tengamos que declarar la Independiencia, de forma unilateral, del Reino de Jaén, eso sí mediante Referendum.