Decíamos
ayer...

Es la frase con que reanudó sus clases Fray Luis de León al recuperar su cátedra tras varios años de prisión, que él daba por perdidos; pues bien, aquí nos pasa lo mismo; mirando el resumen con que despedía el año Diario Jaén y los de hace tres o cuatro años nos encontramos en idéntico punto, o peor, no sé qué pensar. El tren a Madrid en aquella genial viñeta de Juan Carlos paraba en Grañena, allí sigue, y después quien quiera que corra; el Real Jaén —cuatro años más viejo, cerca del centenario— está como solía, sin futuro; el aceite, a precios aún más bajos, y Jaén solo destaca en la sección de sucesos. Hace setenta años quitaba el sueño a Franco, según aquella conocida frase; hoy nadie tiene insomnio. ¿Han hecho algo los políticos? Sin duda, lo que mejor saben: luchar de forma cainita unos contra otros y cargarse a unos cuantos; por la ciudad y la provincia, nada. Aunque hay poco margen para el optimismo, siquiera sea a primeros de año hay que tener confianza; este 2020 bisiesto nos trae un día de regalo, exactamente ese es el que yo le pedí el otro día a los Reyes, 24 horas para cambiar el chip e intentar, entre todos, sacar esto adelante; no es difícil, peor no vamos a estar.