Cuestión de supervivencia

18 ago 2020 / 12:56 H.
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Están en riesgo hábitats que proporcionan hogar a animales de muchos ecosistemas. Las olas de calor marinas ponen en peligro los arrecifes de coral y a los animales coralinos. El aumento de la temperatura dispara la mortandad de animales marinos. Ahora que se pueden predecir y detectar las condiciones en las que cambia el clima, debería bastar para enternecer el corazón de gentes que no renuncian a su ridículo proyecto de acabar con el planeta. Echo en cara a esas personalidades que piensan mucho y hacen poco por controlar su desmedida ambición, deberían reparar en los síntomas de un cambio climático que clama por todos sus rotos la expresión “cortedad de miras” ante las mal disimuladas pruebas de pobreza de espíritu de personas poco respetables que no entienden de cosas como el deshielo de los polos, el crecimiento de la deforestación, la reducción de animales en la biodiversidad forestal o la degradación de los hábitats naturales por la actividad humana y la maldita inactividad para atajar la debilidad de un sistema que no protege con inteligencia algo que se ha ido haciendo cada vez más irreversible . La supervivencia del planeta está en juego y la de sus habitantes, pero siguen sin querer distinguir entre el cuidado de la riqueza real de la naturaleza y la rica contaminación que produce un modelo de consumo y producción humanos insostenible. El mundo anda corto de conciencia y se nota en todo, incluso en las opiniones e inacciones de aquellos falsos ecologistas que con un simple cambio de pensamiento se hubiesen puesto al corriente de los secretos mejor guardados de la naturaleza que dicen defender. Lamentablemente sus “temibles acciones” ignoran que hay que ignorar intereses contrarios a sus verdaderos intereses que pasan ineludiblemente por salvaguardar con premura los espacios naturales y detener cuanto antes el colapso climático: Controlar la calidad del agua, del aire y la erosión del suelo por ejemplo ¿Qué podemos hacer para tener alimentos más sanos o para evitar una mayor degradación de las condiciones naturales del planeta? Para solucionar, en definitiva, un problema que afectará a los biorritmos vitales de unos descendientes que quieren albergar la esperanza de vivir en un planeta que se guste así mismo. Nadie habla de esa esperanza y por ese motivo, tenemos, entre todos, que desempeñar un papel crucial en la solución de un problema ecológico que se agranda por culpa de alguno de los perversos intereses materialistas que degradan y destruyen cuanto tocan. Hagamos de este mundo una existencia placentera y que nuestra conducta detenga el calentamiento global. Hay mucho que hacer, habría que empezar por no menoscabar la valía de la acción personal y la acción global. Es esencial que los causantes de este mal procedan sin rodeos a ganarse la confianza de cuantos pensamos que el planeta no se salva solo, resulta fácil adivinar que hay que pasar a la acción. Pero hay quien se las ingenia para no ver sino la cara de la moneda que más les favorece y es imprescindible recordar las intenciones con las que adoptan ciertas decisiones insensatas y, a menos que las justifiquen, no nos olvidaremos nunca del mal que causan. Como su ambición no conoce límites, exijamos que el planeta no esté a su merced . Actuemos todos con exquisita discreción ecologista.

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