Clases marcianas

Mientras en los colegios públicos andaluces ya se empieza a hablar de tauromaquia y caza, casi como si de una asignatura más se tratara. En Murcia, con el mismo tripartito derechista de gobierno, pretenden imponer el “pin parental”. Una fórmula que los anti constitucionalistas de Vox han exportado de los colegios del Opus, y que permite a los progenitores vetar actividades que ponen en cuestión sus convicciones ideológicas, religiosas o morales, y decidir sobre si sus hijos deben asistir o no, a charlas que informan contra la homofobia y la xenofobia. Con una libertad de enseñanza mal entendida por bandera, exigen que allí donde gobiernan, la escuela pública tenga una desinformación deliberada en cuestiones tan relevantes como la igualdad, o la pluralidad de credos. Si los hijos son antes de sus padres que del Estado, es este último quien a través de la educación dota a la ciudadanía de medios para desarrollarse en la sociedad. Tener consciencia de lo que le rodea es una capacidad que tiene el ser humano para saber el siglo en que estamos. Conocer desde niño el mundo en que vives, te hace saber que no eres marciano.