Alemania vota por el cambio

28 sep 2021 / 16:14 H.
Ver comentarios

Alemania inicia esta semana un rumbo político diferente y se suma junto a países como España, a un escenario político incierto ya que el bipartidismo de SPD y la CDU acabó y pese a la victoria de los socialistas, los resultados de las elecciones del pasado domingo ofrecen la llave del futuro gobierno a los verdes y los liberales. Serán semanas difíciles de acuerdos y cesiones, donde los dos partidos mayoritarios tratarán de asumir las principales propuestas de los grupos minoritarios para hacerse con el gobierno. El
resultado de las elecciones alemanas
nos deja algunas experiencias interesantes para tener en cuenta. La primera
es que a pesar de que el gran acuerdo entre la SPD y la CDU fue cuestionado por una gran mayoría de los socialistas alemanes, no sólo no ha perjudicado
las expectativas de voto de la izquierda, sino que ha facilitado el ascenso de un SPD hundido desde hacía una década y todo gracias a su actual líder y ministro de financias con Merkel, Olaf Scholz.
Estamos en tiempos de los ministros
del área económica. En España las dos ministras que gestionan el área económica son también de las más valoradas por la ciudadanía.

Otro dato a tener en cuenta, es que los verdes han subido hasta colocarse en tercer lugar. Parece que es una tendencia europea el ascenso de partidos que se tomen en serio la emergencia climática, una cuestión decisiva para el voto joven. Y lo más importante es que el cordón sanitario que establecieron todos los partidos alemanes para no legitimar al partido de ultraderecha, Alternativa por Alemania, ha dado sus frutos y ha sufrido un importante retroceso. Es interesante resaltar que la bajada de votos sufrido por el partido conservador no ha ido a parar a manos de la ultraderecha. De esta última tendencia también debería aprender la derecha española que con sus acuerdos están legitimando en
España a partidos que circunvalan tantas veces los límites
de la democracia y el pacto constitucional como Vox.

Lo que resulta claro es que ya no es suficiente con ganar elecciones, sino con tener la capacidad de pactar con una fragmentación de partidos con intereses a veces contrapuestos. Los programas electorales tendrán así cada vez más importancia a la hora de pactar gobiernos.

El futuro gobierno alemán es de
gran relevancia para Europa y para
España. La firmeza del país más
poblado de la UE en cuestiones clave
de la agenda europea como la política exterior y de defensa o la política fiscal será determinante en una década clave para el resurgir de la región. Alemania ha votado cambio
después de 16 años
de un gobierno conservador, liderado por
primera vez por una mujer como Angela
Merkel, que ha sido muy bien valorada por todo el mundo y que sale por la puerta grande. Parte de este éxito es saber irse en el momento oportuno.
16 años ha tardado la ya excanciller
en reconocer públicamente que es y se siente feminista, los mismos 16 años
que le ha costado remontar y rehacer un proyecto político sólido a la izquierda del SPD, que tanto ha influido históricamente en el PSOE y en el socialismo europeo. Esperemos que siga siendo importante para impulsar el proyecto
social europeo.

Articulistas