Dos robos en veinte días y el mismo “modus operandi”
Franco Humberto y María Laura son víctimas de la oleada de hurtos en el centro: El autor de los hechos accede tras “romper el cristal con la tapa de una tragona y se lleva la caja”
Los comerciantes del casco histórico de Jaén sufren, desde hace algunas semanas, cada vez que tienen que bajar las persianas de sus negocios. Los continuos robos han dejado una sensación de miedo e incertidumbre y, cada día, temen ser los siguientes. Franco Humberto Colantonio Layus, que regenta junto a su esposa María Laura Tallone una tienda de chucherías en la intersección entre la calle Maestra y Colón desde hace tres años, ha sido una de las víctimas de esta oleada de hurtos, de hecho, ha sufrido dos en veinte días. El primer robo ocurrió en la noche del pasado 16 de octubre, a las 4:12 horas, “el tercero en tres años”, y el más reciente en la madrugada del 6 de noviembre, a las 2:07 horas. “Entran y se llevan la caja entera. Tardan sólo treinta segundos en romper el cristal y llevársela. Es una tienda a la que vienen muchos niños, entonces hay unos cinco kilos de monedas. No me las puedo llevar todas las noches y traerlas por las mañanas, entonces se quedan en la tienda, únicamente cogemos las más grandes”, ha contado Franco Humberto a este periódico. “Ambos sucesos fueron iguales: con las tapas de las tragonas revientan el cristal de la puerta tras arrancar previamente la reja. Entran y se llevan la caja para, a continuación, escaparse por el callejón. Es la segunda vez que voy a buscarla al mismo lugar: los barrios de San Juan y La Magdalena. El ladrón va dejando caer las monedas por la calle y el rastro siempre me ha llevado hasta esa zona”, ha detallado. “Nosotros decidimos irnos de Argentina y apostar por Jaén para buscar seguridad. A día de hoy ya no vivimos tranquilos”, ha explicado a este periódico para, añadir que, cada vez que suena el teléfono de madrugada, su mujer “se queda con el corazón en la boca”. “La rotura de la puerta y lo que se han llevado equivale a unos cuatros cientos euros”, ha agregado con respecto a los daños. Con respecto al robo del 26 de octubre, ha detallado que la alarma le despertó alertando de un acceso al establecimiento no identificado. En las grabaciones captadas por las cámaras de seguridad se puede ver a un varón que ronda los cuarenta años. Sin embargo, en el último hurto la persona entra con la cara cubierta al establecimiento imposibilitando su identificación.
Por otro lado, también ha contado que una vecina también fue víctima de un robo con violencia cuando “la arrastraron en la puerta de su casa al intentar sustraerle el collar y ahora anda con un andador”. En cuanto aquellos que regentan una tienda, ha aseverado que son unos diez los comercios afectados por esta oleada de robos: “Esto ocurre desde hace un mes y medio y de la misma manera”, ha acentuado. “Hasta que no robaron en la tienda de “El Abuelo” nadie se había enterado de lo que sufrimos desde hace semanas”. “Esta situación ya la vivimos mi mujer y yo en Argentina y, lamentablemente, si esto sigue así, tendremos que buscar una forma de tratar de vivir tranquilos”, ha contado.
“Lamentablemente, las veces que me llaman de madrugada son para decirme que me han robado”. Las dos primeras veces que robaron fueron en septiembre y noviembre y también de la misma manera. “Hay dos épocas en las que en Jaén no queda nadie: verano y la feria. Las dos veces anteriores fueron así”. “En una ocasión, nos pilló de vacaciones en la costa y tuve que regresar porque sino se quedaba el negocio abierto”. “Yo lo he podido ver porque tengo cámaras, pero hay comercios en los que ni siquiera hay”.
“Alquilo un local y una vivienda, pago todos mis impuestos, no tengo ningún problema con nadie, no recibo ayudas... Esta situación se está volviendo frustrante. Lo único que queremos es ir a trabajar, que es lo que hacemos de lunes a lunes desde hace tres años”, ha destacado indignado Franco Humberto. No obstante pone en valor el cariño que le tiene a la ciudad y, sobre todo, a su gente: “Nos quedamos aquí por los vecinos de la ciudad, pero es que desde hace un mes y medio le están amargando la vida a diez personas distintas”. Por otro lado, ha resaltado que en algunas zonas de la capita “ya no se pueden estar: puñaladas, peleas, drogas...” “Jaén ya no es la que era, no hay tranquilidad. Yo creo que no son las personas de aquí las autoras de estos hechos...”, ha agregado.
El regente de la tienda de chuches hace un llamamiento para que haya una mayor presencia policial en la zona y en toda la ciudad. “No puede ser que en cuestión de tan pocos días me hayan robado a mí dos veces y diez en total a los vecinos de la zona. No vivimos tranquilos y la situación en insostenible”, ha denunciado.