Pablo le da la victoria al Mancha Real en la recta final del derbi 2-1

   
La primera parte del clásico provincial no se distinguió por la vistosidad. Todo lo contrario. Los dos equipos abusaron del juego aéreo y el severo listón marcado por el colegiado propició continuas interrupciones debido a las numerosas faltas.  El arranque, no obstante, anunció una historia diferente con el tempranero gol del cuadro dirigido por José Jesús Aybar. Luque, uno de los refuerzos realizados por el actual campeón del grupo noveno para  el presente ejercicio, dio muestras de su calidad en la acción  que  originó el tanto. El centrocampista percutió por la banda derecha y asistió con un pase medido a Pablo, y este lo aprovechó para batir por bajo y con sutileza a Jesús en el mano a mano. Fue el 1-0, a los dos minutos de juego.
El Martos ni acusó el golpe ni se descompuso. Los futbolistas de Higinio Vilches se mantuvieron fieles al guión y se mostraron ordenados en defensa, aunque en ataque no se prodigaron en exceso. Conforme avanzó el reloj el encuentro ganó en espesura, con dos equipos que prescindieron de la circulación en el centro del campo y optaron por colgar balones aéreos a los delanteros. La táctica derivó en un partido tosco, de brega y sin apenas acercamientos a las porterías.  
El equipo marteño niveló el marcador en una de las pocas ocasiones en las que la jugada nació desde atrás, cogió forma en la medular y generó peligro en la delantera. El disparo final de Pablo, raso y pegado al palo derecho, hizo inútil la estirada de Mendoza. Acto seguido, Negro, que en la segunda parte abandonó el choque tras sufrir un golpe en la cabeza, remató al larguero de la portería defendida por Jesús. La igualdad en el electrónico al descanso hizo justicia a los méritos de ambos equipos. 
Tras la reanudación, Aybar introdujo en el campo a Cobo y Nando, titulares habituales, aunque las prestaciones del equipo tampoco mejoraron. Enfrente, al Martos le faltó atrevimiento para buscar con más descaro la portería de Mendoza. En líneas generales, la segunda mitad se ajustó con precisión a las características de la primera: poco fútbol y mucho brío. Sólo en el tramo final, después de una bella jugada al primer toque del Mancha Real, llegó el segundo tanto de Pablo. El gran protagonista del derbi culminó un contraataque eléctrico, otra vez a pase de Luque, para establecer el dos a uno y ratificar la progresión del campeón en las últimas jornadas.