en Sanidad

El ministerio se plantea, para la próxima temporada de gripe 2019/2020, vacunar al 65% de mayores de 65 años y al 40% de sanitarios y las embarazadas

06 oct 2019 / 12:05 H.

Alcanzar una cobertura de vacunación de la gripe del 65 por ciento entre las personas mayores de 65 años y del 40 por ciento entre los profesionales sanitarios y las embarazadas, es el principal objetivo marcado por el Ministerio de Sanidad en el documento “Recomendaciones de vacunación frente a la gripe. Temporada 2019-2020”, aprobado recientemente por la Comisión de Salud Pública. La finalidad es ir acercándose al objetivo establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Comisión Europea de lograr coberturas de, al menos, el 75 por ciento en el grupo de mayores “tan pronto como sea posible”, así como de aumentar las coberturas de vacunación en profesionales sanitarios y grupos de riesgo. De hecho, en el documento se establece que para la temporada de gripe, que comenzará entre la tercera semana de octubre y la primera de noviembre, se refuerce la captación de las personas incluidas en el grupo de personas mayores de 65 años y en aquellos trabajadores del sector sanitario.

Para alcanzar este objetivo, el departamento que dirige actualmente en funciones María Luisa Carcedo informó de que se van a establecer estrategias que permitan la medición de coberturas en los grupos de alto riesgo de complicaciones por presentar condiciones clínicas especiales, y de que se intentará aprovechar “cualquier contacto” con el sistema sanitario para establecer la recomendación de vacunación. Además, en el documento se insta a reforzar el compromiso de las organizaciones de personal sanitario, sindicatos, colegios profesionales y sociedades científicas con la vacunación anual contra la gripe, pidiéndoles que trasladen a sus integrantes la recomendación de vacunación por “responsabilidad ética” con las personas de riesgo a las que atienden. A diferencia de la temporada anterior, se ha sustituido en la vacuna actual el componente A(H1N1).

La vacuna de la gripe está especialmente recomendada, además de los mayores de 65 años, los bebés a partir de seis meses de vida y los adultos con enfermedades crónicas cardiovasculares (excluyendo hipertensión arterial aislada), neurológicas o respiratorias, incluyendo displasia broncopulmonar, fibrosis quística y asma. Al mismo tiempo, se aconseja a los niños y adultos que padezcan diabetes, obesidad, enfermedad renal crónica y síndrome nefrótico, hemoglobinopatías y anemias, trastornos de la coagulación, hemofilia y trastornos hemorrágicos crónicos, asplenia o disfunción esplénica grave, enfermedad hepática crónica (incluyendo alcoholismo crónico), enfermedades neuromusculares graves, inmunosupresión, cáncer y hemopatías malignas, implante coclear o en espera del mismo, fístula de líquido cefalorraquídeo, enfermedad celiaca, enfermedad inflamatoria crónica, así como aquellos con trastornos y enfermedades cognitivas. Del mismo modo, Sanidad recomienda vacunarse de la gripe a los menores de entre 6 meses y 18 años de edad que reciben tratamiento prolongado de ácido acetilsalicílico, por la posibilidad de desarrollar un síndrome de Reye tras la gripe; personas de cualquier edad institucionalizadas de manera prolongada; mujeres embarazadas en cualquier trimestre de gestación; y menores de entre 6 meses y 2 años de edad con antecedentes de prematuridad menor de 32 semanas de gestación.