“Me siento muy apoyada por pertenecer a este programa”

¿Cómo surgió su afición por la lucha?

—Todo empezó cuando tenía tres años, ya que mis tíos eran los entrenadores de este deporte y a esa edad solo hacíamos juegos para entretenernos y divertirnos.

¿Por qué decidió dedicarse de forma profesional a este deporte?

—En los entrenamientos, poco a poco nos iban introduciendo un apartado de técnica y cuando tenía 11 o 12 años empezamos a ir a las competiciones, que fue lo que más me llamó la atención. La lucha ha formado parte de mi vida siempre.

En la universidad de jaén se acogió al programa de apoyo a deportistas de alto nivel, ¿cuál ha sido su experiencia ?

—La verdad es que ha sido magnífica porque me he sentido muy apoyada por parte de todos y con la difusión que se da a los deportistas. Este programa me facilitó la relación con los profesores cuando tenía que faltar a las clases por los campeonatos y las concentraciones.

¿Qué tipo de apoyo le ofrece la universidad de jaén para continuar con su actividad deportiva y académica sin problemas?

—Nos facilitan el cambio de turnos en las clase, algo que es muy importante para poder entrenar. Asimismo, la relación con el profesorado es magnífica y la UJA tiene muy buenas instalaciones de gimnasio para practicar.

¿Qué mejoraría del programa de deportistas?

—Por la experiencia que yo he vivido hasta el momento en el que no tuve ningún problema, lo dejaría tal y como está. Aunque, supongo que dependerá de la carrera que curse y los profesores que tengan. Ahí yo estoy muy contenta por el trato que tienen conmigo y las facilidades que me dan.

¿Cómo ha compatibilizado el estudio con el deporte en estos años?

—Con mucha planificación y esfuerzo. Al final, si se quiere siempre hay tiempo para todo, aunque haya que sacrificar, a veces, tiempo con la familia y los amigos por poder entrenar y mejorar en el día a día.

¿La lucha le ha servido para mejorar en el ámbito académico?

—Sí me ha servido, ya que decidí entrar en la carrera de Fisioterapia gracias a este deporte.

¿Es más difícil el deporte que el estudio?

—Creo que es más complicado física y psicológicamente, ya que el deporte de alto nivel conlleva una serie de exigencias y constancia que a veces crean presión.

¿Ha tenido apoyo familiar?

—Siempre estuvieron conmigo. Además, mi hermana pequeña también se dedica a la lucha a nivel profesional.

¿Dónde practica su deporte normalmente?

—Entreno en Torredelcampo, donde hace unos años hicieron una sala habilitada para ello.

¿Cuáles son sus logros deportivos y las aspiraciones para el futuro?

—Como cualquier deportista que realice un deporte olímpico su mayor aspiración es ir a unas Olimpiadas. Hasta ahora fui varias veces campeona nacional y medallista en varios torneos internacionales donde fui tercera de Europa en 2016 y dos veces quinta en el Campeonato del Mundo en 2016 y 2017.

En el plano académico, ¿cuáles son sus proyectos más cercanos?

—Empecé la carrera porque quería dedicarme a la fisioterapia deportiva, pero ahora he descubierto muchos ámbitos interesantes y no sé exactamente a qué me dedicaré en un futuro.

¿Tiene claro hacia dónde va a dirigir su futuro profesional?

—Por supuesto, principalmente tengo el propósito de acabar mi carrera e intentar aprovechar todo lo que pueda de la lucha.

¿Queda tiempo para el ocio después de tanto entrenamiento diario?

—Depende de la época hay más o menos tiempo, pero siempre se puede encontrar un hueco.

En un futuro, ¿seguirá compatibilizando la fisioterapia con la lucha?

—Siempre que pueda lo haré. Pero la carrera deportiva no es muy larga, aunque sí me gustaría ser profesora de lucha cuando deje la competición.